El obispo auxiliar de Managua, Silvio Báez, invitó a los nicaragüenses a vivir un día de ayuno y de oración "con el corazón libre de amarguras y sin resentimientos, orando personalmente y en familia y con una confianza infinita en el amor de Dios que libera del mal".
El obispo de la diócesis de Jinotega (norte), Carlos Herrera, instó a vivir este día de ayuno nacional entregando al Señor "nuestro sacrificio y sobre todo pidiendo en Él misericordia sobre el pueblo de Nicaragua".
Los fieles pudieron participar de este modo ayer en la Eucaristía en la que S.E.R. Mons. Carlos Enrique Herrera presidió el exorcismo con la Oración a San Miguel Arcángel. "San Miguel Arcángel, defiéndenos en la batalla", clamó el jerarca católico en su cuenta de Twitter.
Ortega los tildó de golpistas
En los templos católicos del país se rezó la oración de exorcismo a San Miguel Arcángel. Es una oración, precisamente, para combatir el espíritu del mal que hay en Nicaragua, según el Episcopado, que fue tildado como "golpistas" por el presidente del país, Daniel Ortega.
Consideró a los obispos de ser cómplices de las fuerzas internas y de los grupos internacionales que, a su juicio, actúan en Nicaragua para derrocarlo.
Ortega hizo esas acusaciones ante miles de sandinistas en una plaza de Managua y mientras conmemoraba el 39 aniversario de la revolución sandinista.
El 7 de junio, la Conferencia Episcopal propuso a Ortega que adelantara a marzo de 2019 las elecciones fijadas para 2021 y que renunciara a presentarse a la reelección; pero Ortega lo rechazó y pensó que la propuesta mostraba que los obispos estaban "comprometidos con los golpistas", según dijo.