Esta situación se presenta por la decisión del presidente Donald Trump de resolver unilateralmente medidas para paliar los efectos de la pandemia en la economía. Según el recuento independiente de la Universidad Johns Hopkins, Estados Unidos registró ayer un total de 5.017.150 contagios, por delante de Brasil, con 3.012.412; la India, con 2.153.010; y Rusia, con 885.718, que sumados reúnen más de 56% de los casos globales.
Estados Unidos también es el país con más muertos por coronavirus en el mundo, con 162.635; y le siguen Brasil, con 100.477; México, con 52.006; y el Reino Unido con 46.659.
En cuanto a los muertos, Nueva York es el estado más golpeado, con 32.768 fallecidos; seguido de Nueva Jersey, con 15.869; y California, con 10.316.
El balance provisional de muertos ha superado ya con creces la cota más baja de las estimaciones iniciales de la Casa Blanca, que proyectó en el mejor de los casos entre 100.000 y 240.000 muertes a causa de la pandemia, recordó la agencia de noticias EFE.
Trump rebajó al principio esas estimaciones y se mostró confiado en que la cifra final estaría más bien entre los 50.000 y los 60.000 fallecidos, aunque luego auguró hasta 110.000 muertos, un número que también se ha superado.
A tres meses de las elecciones presidenciales la apuesta de Trump por ser reelecto se diluye ante la crisis sanitaria.
Bolivia: confirma comicios para el 18 de octubre
La fecha del 18 de octubre para elegir presidente de Bolivia es inamovible, anunció ayer el Tribunal Superior Electoral (TSE), aunque el Gobierno de facto adelantó que buscará conformar una comisión que explore la chance de un acercamiento con sectores de la oposición que rechazan la postergación y que en la víspera se ausentaron de la ronda de conversaciones que impulsó el Ejecutivo para amortiguar las protestas. El encuentro -en el que sí estuvieron representantes de la Iglesia Católica, Naciones Unidas, la Unión Europea y algunos partidos- tuvo un resultado que cada sector leerá en su favor: para algunos fue un fracaso, por la falta de un acuerdo; y para otros un éxito, porque el TSE garantizó la fecha de octubre “por ley, y con carácter inamovible e impostergable”. Con esa decisión de la autoridad electoral, no parece claro el objetivo de la comisión que propicia el Ejecutivo de facto, más que el de conseguir que cesen las protestas y los bloqueos de rutas, sobre todo de parte de las organizaciones sociales afines al MAS y de la Central Obrera Boliviana (COB), que reclaman que se respete la fecha del 6 de septiembre, acordada antes de que la pandemia de coronavirus se descontrolara. “Con toda la seguridad que las elecciones se llevarán a cabo el 18 de octubre. Me parece mezquino que en esta situación tengamos que tener conflictos sociales que lo único que nos van a traer son más contagios, enfermos. Esperamos la reflexión de los convulsionadores, que no le hacen bien a la democracia y al país”, señaló la mandataria de facto, Jeanine Áñez