La Segunda Sala de Apelaciones aceptó el pedido de la defensa de Fujimori, que permanecía en la Prefectura de Lima, para anular la detención que finalizaba el sábado. El juez Octavio Sahuanay, a cargo de la sesión, sostuvo que la medida contra la líder del partido opositor Fuerza Popular (FP), ordenada por su colega Richard Concepción Carhunacho, no tiene motivaciones judiciales y solo "copió" el pedido de la Fiscalía. Fujimori, hija del ex presidente Alberto Fujimori, sonrió tras escuchar el fallo y abrazó a su abogada, Guiliana Loza, y a su esposo, Mark Vito.
La hija del expresidente se convirtió en la líder de la oposición peruana después de iniciar su carrera política a los 19 años como primera dama sustituta del gobierno de su padre, pero la disputa con su hermano menor afectó su imagen. Keiko, de 43 años, y Kenji, de 38, buscan sentarse en el sillón presidencial que su padre dejó hace 18 años en medio de un escándalo.
Ambos podrían enfrentarse en los comicios de 2021, si no superan sus desacuerdos. Keiko, que en japonés significa "hija bendita", ha pasado la mitad de su vida envuelta en política, a la que ingresó contra su voluntad, según confesó una vez. Una vez liberada, debe atender la situación de su padre, de 80 años, quien está internado en una clínica de Lima en calidad de detenido desde hace dos semanas y debe volver a prisión a terminar de cumplir su condena de 25 años por crímenes contra la humanidad y corrupción.