El bloque de Juntos por el Cambio fue conformado en el último año por los concejales José Gauffin, Pablo López y Agustina Álvarez Eichele (PRO); y Eduardo Virgili junto a Maria Emilia Orozco (Ahora Patria).
Tras la sesión especial donde los ediles designaron nuevas autoridades para el cuerpo, el bloque terminó por desarmarse dejando así dos espacios correspondientes a los partidos que cada uno de los concejales representan.
Álvarez Eichele en dialogo con Nuevo Diario sostuvo que está división que se ejecutó en la última sesión tiene como fin una estrategia legislativa de tener más fuerza en las comisiones de Labor Parlamentaria y de Disciplina, Juicio Político y Responsabilidad Patrimonial encabezadas por el titular del cuerpo, Darío Madile.
“Definimos esto en pos de tener mayor representatividad en labor parlamentario, vemos que es una estrategia inteligente y más ahora que se viene el tratamiento del presupuesto, aumentar la cantidad de presidente de bloque”, explicó la joven edil del PRO.
Sin embargo, uno de los aspectos que fue determinante para esta definición de la fuerza amarilla es la interna que mantiene la Unión Cívica Radical con respecto a integrar institucionalmente en el Concejo Deliberante la alianza cambiemita. A razón de esto, los ediles radicales separaron su bloque en monobloques.
Sobre esto la concejal Laura Jorge Saravia, quien además es vicepresidenta del Comité Capital que conduce Rubén Correa, mantiene una discrepancia con la idea del actual titular capitalino de no avanzar en la conformación de la alianza.
Desde el PRO aseguraron a este medio que la división en bloques partidarios permitirá que se pueda avanzar en conformar un interbloque, donde Saravia que si comparte la idea que la UCR forme parte institucionalmente de Juntos por el Cambio, pueda incorporarse orgánicamente.
El conflicto de la UCR se dio por un acuerdo previo que tenían Saravia y Alberto Salim, concejal que forma parte de línea partidaria de Correa. Salim presidió el bloque radical el último año, y el acuerdo establecía que Saravia debía presidir el bloque en el segundo año de mandato.
Sin embargo según especificó Salim a este medio, “Saravia se fue alejando de su cargo como vicepresidenta del comité capital sin dar explicación” y tuvo acercamientos con las posiciones que plantea el presidente del partido, Miguel Nanni.
Esto motivo a que Salim respetara el acuerdo pero optó por armar un monobloque propio apostando a que la presidencia del comité no quede sin representación institucional en el concejo.
“Para nosotros Juntos por el Cambio todavía no existe, recién la semana que viene Nanni informó que se iban a estar firmando el acta constitutiva, entonces si no existe no vemos la necesidad de anticiparse a conformar un interbloque si ni siquiera tenemos de manera concreta cual va a ser la plataforma política”, dijo Salim.
