En diálogo con Nuevo Diario, el electo mandatario atribuyó el triunfo a la propuesta de “un municipio de puertas abiertas”.
“Ha sido para nosotros una campaña histórica porque nos enfrentamos a un aparato municipal muy grande y que además contaba con el apoyo del gobierno provincial, donde se habían puesto las miradas y las energías en la renovación de la gestión de Mario Mimessi”, recordó Hernández Berni casi con un suspiro de alivio, y agregó: “el pueblo se ha unido en un nuevo proyecto político que supo entender los requerimientos del electorado y de la sociedad, con una campaña de propuestas puerta a puerta que se ha visto reflejada en una elección muy reñida en donde nos separaron 144 votos”.
Si bien hasta este lunes no tenían los números exactos de la distribución de los ediles tartagalenses en el Concejo Deliberante, Hernández Berni anticipó que “será un Concejo entretenido, entendiendo que tenemos por lo menos la mitad de los concejales o mayoría simple; lo importante es que cuando hay ganas de trabajar, entendimiento y diálogo, importa que se cumpla la voluntad popular”, dijo, y añadió: “el 10 de diciembre voy a romper el candado del municipio y abrirle la puerta al pueblo, y después vamos a buscar dónde está el agua”, concluyó el electo mandatario municipal.
¿Voto castigo a Mimessi?
Consultado por el termómetro electoral del domingo, el electo jefe comunal analizó el reñido resultado que mantuvo en vilo a la provincia hasta su definición: “Creo que hubo un porcentaje de voto castigo que se tradujo en los votos de JxC, y en el caso de nuestros votantes, fueron por convencimiento de un electorado que se vio representado por el Frente Avancemos, con una campaña llena de propuestas y estrategias”.
En ese sentido describió al electorado tartagalense como “muy exigente”, teniendo en cuenta que “se trata de una ciudad que tuvo muchos problemas sociales, se puso de pie, y ahora volvió a ser la capital del dengue y del piquete, y es un análisis que debemos de tener en cuenta, y a eso se le suma el reclamo de muchas personas que no tienen diálogo con el Intendente y de un municipio que está de puertas cerradas permanentemente”, aseveró.
Con la mira en la transición
En una radiografía de las elecciones, Hernández puntualizó que el mayor acompañamiento fue de los vecinos y vecinas del casco céntrico: “podemos ver la disconformidad con el actual intendente”, sostuvo, y agregó: “nuestra mirada de aquí hasta el 10 de diciembre tiene que ver con la imperiosa necesidad de un diálogo extenso con el intendente y mucha madurez política para poder llevar adelante una transición de siete meses y poder ejercer la administración del municipio con todos los problemas que tiene la ciudad, y entre ellos el principal es la falta de agua”. El electo jefe comunal remarcó los cambios que se verán: “tenemos que ver cuál va a ser la proyección del gobernador para los próximos cuatro años y de esa manera lograr armar un presupuesto para el municipio conforme a la perspectiva que va a tomar la provincia, al tiempo que generar un municipio productivo”.
