Ambos fueron detenidos el 4 de marzo pasado, cuando entraron a protestar a la empresa en contra de sus despidos y el de otros 177 compañeros suyos.
Luego de un mes y dos días presos por una acusación por estrago doloso, elevado por la fiscal Sofía Fuentes Mayorga, los trabajadores salieron de la Comisaría 20 en donde se encontraban alojados en situación de hacinamiento, según las denuncias que hicieron sus esposas.
A ello se sumó que pese al inicio de la huelga de hambre por al menos 17 días, no hubo ninguna inspección médica dispuesta desde la Justicia. Ello, pese a que el juez había informado al presidente de la Cámara de Diputados, Santiago Godoy, que había enviado a los médicos y que estos aseguraban que ambos trabajadores estaban en situación normal.
Tras su liberación, ambos trabajadores se dirigieron a distintos centros médicos dado que uno estaba mal de la columna y el otro debía hacerse ver la operación de la rodilla.
El abogado que representa a los trabajadores, Hernán Mascietti, indicó que ahora se harán las denuncias en contra de la empresa de seguridad privada de Tabacal.
