Allí las instituciones privadas advirtieron sobre los altos costos del tratamiento de los pacientes con este virus, y desde el Gobierno se comprometieron a analizar la situación.
Los hospitales y clínicas están trabajando con patologías propias de una sociedad en la que están funcionando la mayoría de las actividades económicas habilitadas, por lo que la disponibilidad de cama es menor, a diferencia del año pasado cuando la provincia se encontraba en Aislamiento Social, Preventivo y Obligatorio. "Se viene una segunda ola mucho más difícil, en medio de una campaña de vacunación que consume mucho recurso humano", señaló Francisco Aguilar.
El funcionario pidió el compromiso de todos los sectores, "en la medida que podamos para hacer frente a esta nueva pandemia".
En la oportunidad, el titular del COE agradeció por la activa participación y compromiso que tuvo el sector privado con los salteños el año pasado, "las clínicas atendieron más del 70% de los pacientes con coronavirus, este año, vamos a tratar de solucionar los problemas que se plantearon durante la reunión, para continuar trabajando de manera conjunta y coordinada".
Por su parte, las clínicas expusieron los problemas financieros que están atravesando, porque "el paciente COVID es mucho más costoso que el que se presenta con una patología común", explicaron. Además coincidieron en lo complicado que es conseguir los medicamentos e insumos que se precisan para atender a los pacientes graves y que además enfrentan las especulaciones económicas de los proveedores.
De esta manera se informó que la presidenta del IPSS, Gladys Sanchéz se reunirá con los referentes del sector privado para lograr un entendimiento económico del paciente COVID, mientras que para la semana próxima está prevista una reunión con el PAMI para también lograr un acuerdo con las prestadoras.