Se trata de una tabla de colores de la materia fecal, que presenta ocho gamas diferentes, a la que podrá acceder la madre, padre o tutor del recién nacido escaneando un código QR. Luego, se abrirá una encuesta y deberá responder a cuál de esos colores corresponde las evacuaciones de su hijo, entre los 15 y los 30 días del nacimiento.
Si las heces se encuentran dentro de los primeros cuatro colores, se debe consultar -de forma urgente- en el centro de salud de su barrio para recibir atención de pediatras y gastroenterólogos.
La atresia de vías biliares tiene cura si es detectada a tiempo. El tratamiento se basa en una cirugía que se realiza fuera de la provincia.
“La implementación de esta nueva pesquisa es única en la región y resulta clave en la detección precoz, para tratar y mejorar la calidad de vida de los niños con esta patología”, dijo la gastroenteróloga infantil, Cinthia Bastianelli.
Agregó que “fue desarrollada a nivel local por el equipo de gastroenterología del hospital Materno Infantil”.
La iniciativa surgió de la implementación del proyecto "Dra. Margarita Ramonet: Detección de atresia de vías biliares", que consiste en la capacitación del personal de salud, de las madres y familiares de recién nacidos con esta patología.
Esta iniciativa continúa en ejecución con capacitaciones a los sectores de internación y neonatología del hospital, como en los 31 centros de salud de la zona norte capitalina.
Sobre la atresia de vías biliares
La atresia biliar ocurre cuando las vías biliares dentro o fuera del hígado están anormalmente estrechas, bloqueadas o no están. Las vías biliares llevan un líquido digestivo desde el hígado hacia el intestino delgado, para descomponer las grasas y filtrar los deshechos hacia fuera del cuerpo.
La causa de la enfermedad puede deberse a:
-Infección viral después del nacimiento
-Exposición a sustancias tóxicas
-Factores genéticos múltiples
-Lesión perinatal
-Algunos medicamentos como carbamazepina
Afecta más comúnmente a descendientes de personas del Este de Asia y afroamericanos.
Los ductos biliares ayudan a expulsar los deshechos del hígado y llevan las sales que ayudan al intestino delgado a descomponer (digerir) las grasas.
En los bebés con atresia biliar, se presenta obstrucción del flujo de bilis del hígado a la vesícula. Esto puede llevar a daño hepático y cirrosis del hígado, lo cual puede ser mortal.
Los síntomas normalmente empiezan a presentarse entre 2 a 8 semanas. La ictericia (una coloración amarillenta de la piel y de las membranas mucosas) se desarrolla lentamente de 2 a 3 semanas después del nacimiento. El bebé puede aumentar de peso normalmente durante el primer mes. Después de este tiempo, bajará de peso, se tornará irritable y presentará empeoramiento de la ictericia.