Esta es una de las 11 antenas que se solicitó sean retiradas por los diversos incumplimientos a la normativa que existe desde 2003. En esta se establece que la densidad de potencia de las antenas debe ser de 10 microvatios por centímetro cuadrado. En la medición que realizó el ENACOM en este barrio en particular, se dieron con 8 veces más de emisión que la dispuesta por ordenanza, dijo el delegado del Defensor del Pueblo de la Nación, Félix González Bonorino. Para los integrantes de ENACOM la medición se encuentra dentro de los límites aceptados por la normativa nacional, que es de 1000 microvatios por centímetro cuadrado.
"El Defensor del Pueblo de Nación exhortó el año pasado a bajar esta densidad de potencia", dijo el referente de la entidad nacional al sostener que los argumentos que surgen desde el Municipio respecto a la imposibilidad de ir contra los límites de Nación es una posición poco racional. Agregó que la recomendación de la dependencia nacional tuvo entre sus fundamentos las sospechas que estas emisiones generan problemas en la salud que no solo derivan en un cáncer, sino también en otras situaciones como el estrés, o los accidentes cerebro vasculares (ACV). Por su parte, Florencia Delgado, una de las vecinas, indicó que en un relevamiento que se realizó en dos cuadras a la redonda de la ubicación de la antena, se detectó que hubo al menos unas 20 muertes a raíz del cáncer, y existen unos 10 enfermos más. Entre ellos se encuentra una vecina que vivía al lado de la antena y se enteró de sus efectos por un trabajo de investigación que realizó su hija mientras iba al secundario. Pese a los reclamos que hizo ante la Municipalidad, nunca obtuvo respuestas. La mujer, de apellido González, falleció hace tres años.