En este caso, el ataque ocurrió el sábado a la noche, cuando la víctima conducía su vehículo por un cruce de la vía férrea.
El paso nivel, casualmente, fue el lugar elegido por los asesinos para descargar su ataque homicida, ya que en ese tramo la víctima debe reducir la velocidad de su automóvil. Según lo informado hasta anoche, el ataque fue perpetrado por dos sujetos que se movilizaban en una motocicleta, en la cual, luego de cometer el crimen, se dieron a la fuga hacia territorio boliviano.
En cuanto a la víctima, se pudo saber que el hombre asesinado tenía 45 años y residía en el barrio Evita, en esa ciudad fronteriza.
Al momento del ataque, la víctima conducía su automóvil, en el cual iba como acompañante un hijo de 14 años, quien no sólo fue testigo del crimen de su padre sino también fue víctima de la balacera.
El joven adolescente, según fuentes policiales, recibió un disparo que le perforó uno de sus pulmones, lesión por la cual ahora se debate entre la vida y la muerte.
Al hospital
El hombre asesinado se dirigía al hospital local, ya que debía someter a su hijo a una curación, cuando fueron sorprendidos atacados en el paso nivel.
Para la policía, cuando la víctima redujo la velocidad del rodado para cruzar las vías férreas, uno de los asesinos, quien viajaba como acompañante en la motocicleta, descendió y se puso del lado del conductor, al que le realizó varios disparos. Dos de ellos, impactaron en el rostro y la cabeza, causándole la muerte en el acto.
Su hijo, en tanto, recibió un disparo a la altura de los pulmones, por lo que fue derivado de urgencia al hospital local, donde recibió las primeras curaciones, para luego ser derivado al hospital Juan Domingo Perón, en la ciudad de Tartagal.
En tanto se recupera, la policía lleva adelante la investigación del crimen, el que, sin dudas podría estar vinculado a algún “ajuste de cuentas” con la víctima, aunque se desconoce, por el momento, las razones del violento ataque.
