La Fiscalía Penal 2 de la Unidad de Graves Atentados contra las Personas, a cargo de Pablo Paz, tuvo a su cargo el acto de imputación de Rubén Rogelio Ríos y Julio Rosario Ríos.
El hecho fue reportado por Julio Rosario Ríos, quien en su declaración refiere que no se encontraba en el lugar y que cuando llegó Ale ya se encontraba muerto, por lo que decidió solicitar ayuda.
Según refieren testigos, la enemistad tendría que ver con el pastoreo y paso de ganado vacuno de la víctima por la finca en la que uno de los hermanos se desempeñaba como cuidador.
Durante la audiencia de imputación, Julio Ríos declaró y manifestó que no se encontraba en el lugar donde ocurrió el hecho y que cuando llegó, la víctima ya había fallecido. Dijo conocer que su hermano había mantenido una gresca con la víctima antes de que se desatara la tragedia.
Rubén Ríos, por su parte, se abstuvo de declarar y ambos permanecen detenidos. Desde la Fiscalía se trabaja con la recepción de testimonios y se esperan los informes de distintas pericias y diligencias solicitadas.