Como corolario de esta conmemoración, desde el Consejo Superior de la Universidad Nacional de Salta se resolvió la adhesión a esta ley.
De esta manera, la casa de altos estudios se transformó en la onceaba en el país en adherirse a la ley 276.316 que reserva un cupo del 1% del total de cargos para personas de ese colectivo.
Al respecto, la secretaria general de la Asociación del Personal de la UNSa (APUNSa), Stella Mimessi, aclaró que con esta disposición se abrirán seis cargos no docentes para personas trans, ya que en el caso de los cargos docentes se requiere modificar el estatuto. "La Universidad Nacional de Salta, al adherir a la ley nacional, después buscará los instrumentos para llevar adelante, es un enorme desafío"; sostuvo la activista del colectivo LGBTIQ+ Pía Ceballos y agregó: "Es mucha más profunda la transformación que se va a dar en todos los espacios de esas áreas laborales".
"Ya no podemos pensar que el destino de las travestis sea la muerte por abuso o la prostitución, tenemos que tener oportunidades como cualquier otra persona, y que el empleador no nos juzgue por nuestra identidad", agregó.
La ley avanza con una mirada integral, federal y transversal. Exige a los organismos del sector público nacional a promover acciones de sensibilización con perspectiva de género y de diversidad sexual en los ámbitos laborales para contribuir a una efectiva inclusión. Los empleadores que contraten trabajadores de la comunidad trans travesti tendrán un incentivo tributario para fomentar más acceso al empleo.
Si las aspirantes no completaron su educación obligatoria, se garantizará su ingreso laboral con la condición de cursar y finalizar sus estudios.
Se promueven líneas de crédito con tasa preferencial para el financiamiento de emprendimientos, destinados específicamente a personas solicitantes travestis, transexuales y transgénero. También se prevén criterios de prioridad para la compra de insumos y provisiones a personas jurídicas que incluya en su planta laboral a personas del colectivo.
