El informe fue dado a conocer el 11 de enero en base a los registros fotográficos obtenidos entre fines de 2018 y principios de este año.
La especie había sido citada para la Argentina en 2014 en el departamento salteño de Iruya y en 2016 en el Parque Nacional Calilegua, en Jujuy, pero nunca había sido registrada oficialmente en Baritú, donde sólo se contaba con testimonios de avistajes y cantos.
Por esta razón fue incluida en el Plan de Gestión del área protegida como especie a tener en cuenta como valor de conservación por su condición de especial. Durante diferentes patrullas y salidas de campo, agentes del Parque Nacional realizaron observaciones directas de ejemplares machos y hembras, también registraron vocalizaciones.