Salta y Tucumán son las primeras provincias en el país que implementaron el sistema de pase sanitario. En Salta tiene vigencia hasta el 31 de diciembre y consiste en presentar el carnet con el esquema completo de vacunación para concurrir a actividades que representen un mayor riesgo, como restaurantes, cines, salones de eventos, gimnasios y encuentros deportivos profesionales y federados, boliches, catamaranes, casinos y salas de juego y es exigible a mayores de 18 años. Busca incentivar a la población a completar el esquema de vacunación ante el avance de la variante Ómicron. En tanto el Gobierno nacional implementará el pase sanitario a partir del 1 de enero para el ingreso a eventos masivos, al que Salta ya anunció que adherirá.
Estas medidas no cayeron bien entre los que desconfían de las vacunas que se aplican en Argentina y que ven en el pase sanitario un cercenamiento de derechos individuales. Por eso, ciudadanos decidieron agruparse para juntar firmas para cualquier acción legal que pudiera surgir, manifestándose al respecto por segunda vez en el mes. Los interesados en firmar pueden hacerlo en Alvarado 459 o San Martín 1653 en horario comercial
"Venimos organizando marchas de acuerdo a los acontecimientos. Ahora nos focalizamos en el pase sanitario, pero se hicieron marchas en contra de la vacunación a los niños", explicó Patricia Pema, una de las referentes de la movilización.
Contó que también hicieron presentaciones ante la legislatura cuando en Diputados se debatió el proyecto presentado por Daniel Sansone, quien solicitó que la vacuna contra el Covid 19 ingrese en el calendario nacional de vacunación.
"Pedimos que nos escuchen porque tenemos la libertad de decir que no aceptamos esta inoculación a la que nos están sometiendo. No somos un experimento. Las vacunas siguen en fase experimental", señaló Patricia Pena y agregó que el Gobierno nacional aceptó que la población sea utilizada para la experimentación.
"No somos antivacunas, sino antiexperimentos. No estamos de acuerdo con este tipo de sustancia a las que nos quieren someter. Si vos creés que esa sustancia es útil para tu organismo, como ser humano tenés la libertad de elegir sobre tu cuerpo y lo dice la Constitución, pero si no querés, no hay porque hacerlo", aseveró Pema.
La vecina también criticó que las dosis de las vacunas sean intercambiables entre las distintas marcas.
Pese a que la Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica (Anmat) el 10 de diciembre de 2020 elevó un informe al Ministerio de Salud de la Nación en el que señala que los procesos de fabricación utilizados en los productos de vacunas Sputnik V “son aceptables y compatibles con lo establecido en normativa vigente en la República Argentina”, Pema marcó que “no es muy claro” y que son resultados de acuerdos.