El acusado aseguró que el abogado Martín Méndez Mena, que trabajaba en el Juzgado Federal de Orán y es uno de los testigos de cargo en este proceso, le fue “recomendado expresamente por el doctor Renato Rabbi Baldi Cabanillas” igual que el abogado José Antonio Fernández, otro empleado testigo de cargo. “Qué casualidad, los dos son los testigos estrella de este proceso”, añadió.
Sobre Méndez, dijo que “para trabajar en Orán estaba enfermo, pero para comer asado no”. El ex juez sacó a relucir también que hay empleados del Poder Judicial Federal que usan a Juzgados de localidades alejadas para ingresar a la planta de trabajadores y luego piden el traslado.
Tras memorar que tuvo que recusar “con causa” a la jueza Mariana Catalano y que el defensor oficial Martín Bomba Royo también se apartò de este proceso, Reynoso sostuvo: “Insistentemente le he pedido al doctor Rabbi Baldi Cabanillas que no resuelva” en relación al proceso que lo involucra, más allá de que opinó que “el código de ética de cualquier magistrado lo haría apartarse”.
Se sintió desprotegido
Por otra parte, Reynoso recriminó a sus pares no haberle dado protección cuando recibió amenazas de muerte. Lo hizo cuando intentaba explicar su actuación en la causa en la que detuvo a Iván Cabezas y a otras personas por un supuesto caso de narcotráfico que finalmente terminó en nada. Dijo que Gendarmería Nacional le informó de amenazas de muerte y por eso ordenó allanamientos y detenciones. “En todas los otros casos de amenazas que sufrí yo o mi familia, siempre me sentí desprotegido por mis colegas”.
Segovia libre "a cambio de qué”
Raúl Reynoso recordó que inicialmente también fue investigada y detenida, acusada de integrar la asociación ilícita, la abogada María Lucinda Segovia,quien recuperó su libertad a las 48 horas y luego se le dictó una falta de mérico. “Me preguntó a cambio de qué”, especuló el ex magistrado.
“Qué curioso, miembro de la asociación ilícita, recuperó su libertad”, añadió. Recordó asimismo que finalmente fue sobreseída, antes de que se elevara este proceso a juicio.
Esto le sirvió al ex juez acusado para poner de relieve lo que considera un trato diferenciado de parte de la Justicia: una imputada por asociación ilícita estuvo detenida solo dos días; otros estuvieron un mes y finalmente él, lleva detenido un año, 4 meses y 15 días, reseñó.
En este proceso están acusados también los abogados René Gómez, Antonio Valor, Arsenio Gaona y María Elena Esper; los empleados judiciales Miguel Saavedra y César Aparicio y la hermana de éste, la docente Rosalía Aparicio.