Esa línea partidaria denunciaba una serie de supuestas irregularidades en esa compulsa interna para la renovación de autoridades partidarias por el período 2016/2020.
“Más allá de los fundamentos y decisorios judiciales notificados, que decididamente no compartimos, resolvimos acatar dicha determinación jurisdiccional entendiendo que un fallo buscado en la primera quincena de julio y resuelto a fines de noviembre poco y nada iba a aportar a la imprescindible necesidad de establecer reglas claras de todo proceso electoral interno en los partidos políticos vigentes en la Argentina”, afirma una declaración con la firma del ex candidato a presidente Oscar “Pino” Rocha Alfaro.
Severos cancerberos
“Los jueces, con competencia electoral en especial, deben constituirse en severos cancerberos de la mayor libertad de participación electoral -partidaria, garantizando la igualdad de participación y propendiendo a la mayor democratización partidaria, entre las variables más gravitantes. Honrar la democracia, en términos de proceso electoral partidario interno, significa obtener una victoria a través del sufragio de los afiliados y, sin dudas que no, en algún despacho judicial”, se agrega.
Varios caminos electorales
Se afirma también que las diversas vertientes dirigenciales que integraron el espacio que denominamos Participación y Cambio Renovador adoptarán el camino que cada una estime conveniente. “Seguramente habrá quienes se desafilien al PRS, “otros partirán a intentar participar en otros partidos políticos existentes en la provincia y otros caminaremos hacia un nuevo espacio de participación política que sea el reservorio ético de los primigenios principios que dieron origen al PRS, hoy ya llamado PARES, como así también de los nuevos influjos impulsados por la era posmoderna que nos encontramos transitando”.
Finalmente se señala que “para salir de su actual estancamiento y realmente propiciar una mejor calidad de vida de todos los comprovincianos, la vida institucional-política de la provincia necesita de una verdadera alternancia democrática, de la renovación periódica de sus representantes aboliendo la posibilidad de eternizarse en los cargos institucionales y sobre todo de reglas claras, democráticas, republicanas y participativas. Hagamos lío”.