Las consultas se hicieron ante los reclamos de algunos vecinos del departamento norteño, que veían crecer el Pilcomayo al punto de ganar terreno en algunas propiedades. Sin embargo, desde la entidad se explicó que la altura de desborde luego de las obras realizadas en el cauce de este río es de 5.73 metros.
Si bien desde la estación Villamontes se informaba con alivio que el río venía bajando, las autoridades decidieron seguir en alerta ante el aporte que podían generar las lluvias en la zona salteña por donde pasa el río.
La importancia de tener información desde Villamontes radica en el hecho de que, una vez contemplada esa información, se cuenta con entre 30 y 36 horas de tiempo para poder disponer de un plan de contingencia ante el desborde y las ayudas necesarias a las comunidades que viven en la zona.
Iglesia anegada
Mientras, la crecida de dos arroyos generó en el día de ayer que la Iglesia de esa ciudad haya terminado con barro dentro del local. Según se informó desde Defensa Civil, la situación no generó demasiadas complicaciones, al punto que hasta ayer, por lo menos, no había incomunicación en los caminos.