En la ruta provincial 34 entre el tramo que une a Embarcación con Hickman (en el departamento San Martín), miembros de las comunidades Salim y Pedro Lozano, cercanas a Embarcación, decidieron iniciar un acampe y cortes para solicitar por ambulancias y médicos.
Según lo contó el médico de Misión Chaqueña, Rodolfo Franco, las comunidades se encuentran sin posibilidad de atención porque están alejadas de los puestos sanitarios con médico (que es Franco), y no tienen profesionales en los puestos de Salud de sus zonas.
Franco señaló además que están sin la única ambulancia que tenían de manera permanente en Misión Chaqueña, y que fue derivada para otras necesidades del área operativa a cargo del Hospital de Embarcación, por falta de vehículos. “La semana pasada una mujer que se dislocó el hombro y estaba con el dolor en un solo grito tuvo que esperar cinco horas para ser trasladada a Orán”, dijo Franco al relatar sobre esta realidad.
Derivados y sin atención
Gervasio Barbier, delegado del Instituto Nacional de Asuntos Indígenas (INAI), en Santa Victoria Este, sostuvo que el problema para los pacientes de esta zona se genera en el Hospital de Tartagal, cuando logran ser derivados por distintas dolencias.
Entre las experiencias contó la de su hija que cuando tuvo que ir por una operación del hígado “tenía turno para un día. Pero llegó y le dijeron que el médico había pedido licencia. Tuvo que esperar otros nueve días”.
A esta experiencia se sumó la de otro paciente con cálculos en los riñones, que al igual que la hija de Barbier debía ser trasladado a Tartagal y tuvo el mismo problema.
En ambos casos, entre los conflictos que se generan para los pacientes existe el de la falta de dinero para poder mantenerse en Tartagal mientras esperan que vuelvan los médicos que deben tratarlos y que no están pese a que los pacientes tienen turnos.