Ante ello, el productor de cerdo y secretario de Economías Regionales de la Federación Agraria Argentina (FAA), Eliseo Rovetto, indicó que justo ahora cuando hace solo cinco años iniciaron el proceso de reconvertir la actividad de siembra de granos a carne de cerdo, y habían logrado abastecer en gran parte al mercado interno.
Sin embargo, por un comunicado elevado desde la FAA, se pudo conocer que desde 2015 aumentó en un 235% la importación de carne de cerdo desde otros países y empeoró la situación de los chancheros.
De hecho, el costo del kilo de cerdo que se paga al productor en el mercado local es de 21 pesos más IVA, cuando la inversión por similar parámetro es de 25 pesos.
Rovetto indicó que están trabajando a pérdida y criticó la falta de estabilidad de las políticas que se sostengan más allá de las gestiones administrativas de turno, como sucede con este cambio de rumbo de este tipo de políticas que implica un perjuicio, sobre todo a pequeños y medianos productores de cerdo que conforman el 90% del total de productores de carne porcina en el país.
Señaló que la situación es similar para quienes producen cebolla, vino, banana o zanahoria, entre otras producciones locales que están siendo reemplazadas por productos importados.
Otra de las críticas que realizó la FAA tiene que ver con la cuestión sanitaria. La carne que proviene de EEUU podría estar afectada por el virus de la piel azul. Pero además, el producto que llegará a Argentina será el que sobre en EEUU.
Mientras, desde el sector chanchero se había trabajado a un punto que incluso estaban pensando en la posibilidad de exportar la carne de cerdo, lo cual ven ahora como un intento que, en caso de prosperar la idea del Gobierno nacional de importar, quedaría frustrado.
De granos a carne
El director nacional del INTA, Héctor Espina, acordó con los conceptos de Rovetto al sostener que la producción de cerdo es una de las que más creció en regiones como las del NOA, en el plan de reconversión de granos a carne.
“Yo no conozco el detalle de la importación. Pero deberíamos preservar este tipo de producción que genera trabajo y que arraiga gente en el lugar y a la cadena de producción la enriquece. Y (la de cerdo) es la carne en el mundo que más se consume. Así que creo que deberíamos tener cuidado”, indicó al ser consultado por las versiones de importación de cerdo desde EEUU.
