Sin embargo, ante la situación de emergencia que presentaban los vecinos de Güemes tras los fuertes vientos del temporal, decidió poner a salvo a su familia y salir a ayudar con sus compañeros bomberos a sus vecinos. Hoy vive en la base del cuartel. Sus padres y hermano, quien también es bombero, pudieron rearmar una pieza en el humilde barrio Nueva Esperanza, pero sigue teniendo paredes de plástico y lona, recubierto con algunas chapas.
“Tal como estaba su casa, toda derrumbada, salió con sus compañeros a ayudar a las otras personas que fueron afectadas por el viento. Cuando volvió, los bomberos trataron de rearmarle la casa dónde vive con su mamá, que tiene cáncer. Él trabaja haciendo changas y es bombero, sus compañeros tampoco tienen recursos como para ayudarlo”, comentó a Nuevo Diario, Oscar Serrano, periodista de la zona.
“Hay que destacar que a pesar de que tenía la posibilidad de que sus compañeros ayuden primero con su vivienda, López prefirió salir a ayudar a los otros güemenses, lo que es digno de destacar”, remarcó Serrano.
Por la precaria situación del bombero, sus compañeros de cuartel piden ayuda y colaboración para que pueda volver a vivir con su madre, y si se puede en mejores condiciones. Las mismas se reciben en la sede del cuartel, Ameghino al lado de la parroquia Virgen del Valle, La Banda. Los interesados pueden comunicarse con Manuel Calú, jefe de los bomberos.
