Afirman que no son tenidos en cuenta por la Municipalidad ni el Gobierno provincial para la ejecución de obras que le permitirán una mejor calidad de vida.
Agustín Padilla, presidente del centro vecinal, aseguró a Nuevo Diario que las calles están todas rotas y que si bien tiempo atrás se re pavimentaron algunos pasajes, el pavimento está nuevamente deteriorado. "Tenemos expedientes presentados en Obras Públicas de la Municipalidad desde hace mucho tiempo pero no nos responden y los funcionarios tampoco nos atienden", afirmó.
La falta de desmalezado en la zona se convirtió también en una alerta de inseguridad, sobre todo en inmediaciones a la escuela América Latina donde los niños y transeúntes en general deben pasar por las vías que sólo tiene una precaria pasarela que en épocas de lluvias se convierte en un pantano.
"Por esa zona tenemos que pasar armados o acompañados porque es un aguantadero, no tenemos seguridad de salir vivos", agregó.
La semana pasada los vecinos cortaron las avenidas principales del barrio con los mismos reclamos. Padilla indicó que el próximo jueves los presidentes de los centros vecinales de la zona oeste se reunirán con funcionarios de la Policía de la Provincia para evaluar de qué manera se pueden abordar los problemas de inseguridad y de venta de drogas.