La separación de su cargo como secretario del Interior más las agresiones que sufrió Omar Pereyra la semana pasada en el edificio de la Uta propiciaron el caldo de cultivo que desembocó en la toma de la sede sindical, al parecer lideradas por el mismo Pereyra. Los manifestantes desde las ventanas del edificio aseguraban que además, Flores no tenía una buena gestión y que el servicio ineficiente de la obra social continuaba.
Pasadas las 8, los 32 afiliados ingresaron munidos con palos y combustibles y tomaron como rehenes a Jorge Flores, Miguel Rasjido, Mario López y Sixto Tactagi. Pedían además que dirigentes nacionales convaliden la destitución de Flores.
Consultados sobre por qué exigían sólo el apartamiento de Flores y no de toda la comisión directiva, los manifestantes afirmaron que “Tactagi, secretario adjunto, debía quedar en el cargo para que el gremio no sea intervenido y así Pereyra pueda asumir como secretario gremial”.
Ante las versiones de que sería el mismo Tactagi el promotor de la toma, él dijo “hay compañeros afiliados y despedidos que dicen que acá no se está haciendo nada y piden a Buenos Aires que nos vayamos todos. Con Flores he tenido muchas diferencias por su forma de trabajar porque yo voy a hablar con el empresario y si no acepta voy al Ministerio de Trabajo, en cambio Flores habla todo el tiempo. Pero yo no organicé esto”.
Tactagi aseguró que él también estuvo aislado al igual que Flores y que los afiliados los despojaron de los celulares. “Los compañeros no me dejan que me retiren, estoy en la misma situación que Flores, seguro quieren culparme a mí”, agregó.
Los que tomaron el edificio continuamente exigieron que se liberen los cordones que dispuso el comité de crisis conformado por efectivos de Infantería, Gopar y Policías para que los otros afiliados ingresaran y Flores pudiera así frente a ellos renunciar. Afirmaban que las puertas de ingreso estaban aseguradas y soldadas, los vehículos del interior rociados con combustibles y cada tanto amenazaban con tirar bombas molotov si no se cumplía con lo requerido.
No obstante, tras intensas negociaciones los belicosos a las 16 liberaron a Flores, Tactagi, López y Rasjido. Cerca de las 19 depusieron la rebeldía y se entregaron. Treinta y dos personas fueron trasladadas a la Fiscalía Nº6.
AGREDIERON A PERIODISTAS Y A UN FOTÓGRAFO DE NUEVO DIARIO
Durante la mañana se registraron incidentes con la prensa que cubría la toma del edificio sindical y así el fotógrafo de Nuevo Diario, Luis Benjamín Arias, resultó lesionado tras caer por el avasallamiento policial que pretendía reducir la permanencia de periodistas en el lugar. También periodistas de canal 10 y de FM Brava fueron agredidos.
Efectivos que conformaban uno de los cordones policiales al tratar de impedir que algunos delegados volvieran a unirse al grupo que apoyaba a las personas que mantenían detenido a Flores y demás secretarios, tuvieron refriegas con la prensa que trataba de cumplir con su función de informar. Así Arias fue empujado por los uniformados y cayó al suelo.
Con la clara intención que los medios de comunicación no cubrieran el hecho, muchos periodistas quedaron en medio de los cordones. Personal de la funeraria Pieve los asistió con agua y comida, además de brindarles espacio para poder registrar los hechos que se fueron sucediendo a lo largo de la jornada, hasta la rendición de los belicosos.
Videos de los hechos fueron difundidos por varios medios salteños e incluso nacionales, ya que la información, por su novedad, despertó el interés de los medios.
DENUNCIAS Y DETENCIONES
El gremio denunció y el juez Federal Medina ordenó 32 detenciones
Luego de ser liberado, Sergio Flores, secretario General de la Uta, junto a Miguel Rasjido y Mario López, el secretario adscripto del gremio, Jorge Pargave, radicó la denuncia por los hechos en la Comisaría Segunda y en la Fiscalía. Luego que el juez de Garantías Nº 2 Ignacio Colombo declarara la incompetencia de la Justicia Provincial y caratulara el hecho como secuestro con fines extorsivos, el juez Federal Medina ordenó la detención de 32 personas
Desiderio Diez, abogado del sindicato, precisó a Nuevo Diario que los gremialistas permanecieron detenidos en la sede sindical contra su voluntad. Se trata de personas que irrumpieron en el sindicato con armas blancas, palos, líquidos incendiarios, amenazando a la gente con prender fuego. Hicieron destrozos. En la fiscalía ratificaron la denuncia”, dijo.
“Pedir la destitución de Flores no los habilita para la privación de la libertad de las personas. Si hay desmanejos como dicen deberían dirimirlo con la gente respetando la mayoría de los afiliados”, afirmó Diez.
Sostuvo que algunos de los referentes gremiales sufrieron contusiones y golpes varios.
En tanto, el Juez de Garantías Nº 2 Ignacio Colombo, a pedido del fiscal Córdoba, declaró la incompetencia de la Justicia Provincial. El hecho fue caratulado como secuestro con fines extorsivos.
Explicó además, que la decisión obedece a que el hecho fue calificado provisoriamente como “secuestro con fines extorsivos”, que es de competencia de la Justicia Federal. “Todos están provisoriamente imputados como coautores del delito de secuestro con fines extorsivos”, remarcó.
Agregó que la pena estipulada para el mencionado delito prevé una condena máxima de 15 años de prisión.
