Así lo informó el abogado Pablo Cardozo, quien recordó que la liberación se produjo a pesar de que había informado que hay testigos “de la connivencia policial” con el acusado y de un intento de ataque sexual que habría habido también por parte de Aparicio en perjuicio de su ex pareja.
Aparicio estaba detenido desde finales de febrero, luego de que su ex pareja lo acusara por lesiones, en una denuncia presentada en la Subcomisaría de Aguas Blancas.
Posteriormente Cardozo, que representa a la denunciante, agregó que las lesiones (el denunciado la besó por la fuerza, le rompió los labios mordiéndola y le propinó un cabezazo que le lastimó la nariz), ocurrieron en medio de un intento de abuso sexual por parte del acusado.
En ese momento el abogado también denunció una connivencia entre la Policía de la población fronteriza y el presidente del Concejo Deliberante, Luis Saiquita, quien por esos días estaba al frente de la Municipalidad, por licencia del intendente Sergio Oliva. Cardozo sostuvo que Saiquita intentó convencer a la ex pareja de Aparicio para que desistiera de la denuncia, afirmando que la Policía no iba a prestar atención a sus acusaciones.
En la denuncia, la mujer contó que en enero pasado terminó la relación con el periodista y funcionario, precisamente como consecuencia de que es una persona “agresiva, celosa y violenta”. La agresión se produjo el 23 de febrero, en la vía pública.
Según denunció, su ex pareja la insultó, la tomó de los pelos y, forzándola, la besó, le mordió los labios y le dio un cabezazo que le provocó una lesión en la nariz. La mujer añadió que ya antes había sufrido agresiones físicas y verbales por parte de quien era su novio.
Entonces la joven había solicitado que se le imponga a Aparicio la prohibición de acercamiento, “dado que los dos alquilan en el mismo inquilinato, por lo que (...) siente temor ante posibles represalias” contra ella o sus dos pequeños hijos.