La primera presentación estuvo organizada por la Unión Autónoma de Comunidades Originarias del Pilcomayo.
El libro, editado bajo el sello "Ediciones del Centro Cultural Tewok", es la primera editorial wichí y de pueblos originarios de la provincia, y se destaca por la cantidad de poetas mujeres (cinco poetas y una narradora), que dan vida y voz a la cultura wichí.
El Centro Cultural Tewok, de la Comunidad Wichí de Santa Victoria 2 que nació en 2005, utiliza el sistema cartonero que es un movimiento internacional que permite las ediciones independientes, ecológicas y autogestiva.
Este libro de poesías se concretó en el marco de un intercambio poético intercultural, entre poetas urbanos y wichí, que ganó una beca a la creación del Fondo Nacional de las Artes en Letras, con apoyo de la Fundación Cultural Cebil.
LHÄ WATSANCHEYÄJ, que en lengua wichí, significa Nuestra naturaleza verde sostenida, cuenta, en la profundidad del lenguaje poético, su particular visión del mundo.
Entre todos acordaron el tema de "nuestra relación con la naturaleza", para escribir poemas y textos que den cuenta de las visiones para revertir el grave daño ecológico que se está haciendo a la Madre Tierra.
Con los fondos de la beca y el apoyo de la Fundación Cultural Cebil se organizaron el viaje, convivencia, registro audiovisual y materiales de los talleres. Se dieron talleres de escritura poética, traducción y realización de libros cartoneros, y numerosas actividades de diálogo intercultural.
"Fue para nosotros una experiencia fundamental para ampliar los horizontes de la lengua a partir de la riqueza de la lengua wichí. Hubo mujeres con una calidad impresionante. También participaron maestros bilingües que hicieron un trabajo de traducción exquisito y profundo que permitió un libro de excelente calidad", remarcó Verónica Ardanaz, referente de la Fundación Cebil, quien además destacó la importancia del libro impreso
Las poetas wichí de la Comunidad de Santa Victoria 2 que participaron, son: Katés Mendoza, Karina Mendoza, Candela Mendoza, Evita Mendoza, Hokinaj Mendoza y el joven Sebastián Mendoza.
Los poetas y editores urbanos: Ricardo Piña, Celeste Diéguez y Verónica Ardanaz. El prólogo y traducciones las hicieron Tischil Mendoza, Lutsej Mendoza y Mawo Mendoza.