Por su parte, el abogado sostuvo que fue detenido cuando se presentó ejerciendo la defensa del detenido Marco Antonio Reyes, y que el juez le reprochó un exceso en la defensa y tras hacerlo esperar horas, lo hizo detener.
“De las pruebas reunidas en la causa, surge a primera vista la posible participación del abogado Arsenio Gaona en una asociación ilícita destinada a cometer indeterminados y variados delitos que están siendo investigados en este Juzgado”, dijo Martínez Frugoni a FM Ciudad, de Tartagal.
Gaona, ex cuñado del ex juez federal Raúl Reynoso, está siendo juzgado en el TOF 1, acusado de integrar otra asociación ilícita encabezada por el ex magistrado.
Gaona contó que el viernes, tras esperar varias horas la indagatoria de Reyes, “el juez y me anticipa que me iba a detener porque me consideraba partícipe de una asociación ilícita”.
Añadió que pidió la excarcelación, y criticó al Juzgado Federal tartagalense, dijo que con la excusa de poner a cargar su teléfono celular, se lo secuestraron, igual que hicieron con su camioneta, le dijeron que alguien estaba merodeándola y que se la iban a guardar.
“Me dí cuenta que la iban a secuestrar y le entregué las llaves”, narró. Gaona añadió que, además, a su defendido Reyes se le tomó declaración indagatoria sin abogado que lo asistiera, y el juez no le designó un defensor oficial.
Asimismo, enfatizó que como abogado en el ejercicio de su profesión, no debió ser detenido. “Avasallaron mis derechos porque yo, en el ejercicio de mi profesión, tengo la misma dignidad que un juez, no me puede tratar así ni hacer eso, tengo las mismas garantías que un juez”, afirmó.
Este mismo argumento usaron otros abogados juzgados en la causa en la que está imputado Reynoso como jefe de una banda. “Me solidarizo con Gaona, porque cada vez nos pisotean más. Se olvidan que los abogados tenemos que tener el mismo trato que un magistrado”, sostuvo René Gómez.
También, Miguel Ángel Fernández, que asiste a Gaona en este juicio, subrayó que no se debieron hacer escuchas de las conversaciones entre el abogado y su cliente, como habría ocurrido en el caso de la causa a cargo de Martínez Frugoni.