De esta manera impedirán que César Ismael Palma, Agustín Vicente Pérez y Luis Rodrigo Gil, imputados por abuso sexual de la menor, no reciban visitas de sus allegados.
La madre de la adolescente, tras ingresar a la fuerza a una vivienda donde los vecinos le indicaron que podía estar la adolescente, tiró a golpes la puerta de una habitación con llave y encontró a hija completamente desnuda en estado insconsciente con Palma y Pérez.
En tanto, Antonia Gil, es la propietaria de la vivienda donde se perpetró el abuso y madre de Rodrigo Gil, quien también esta imputado por abuso sexual con acceso carnal calificado. La mujer fue trasladada a Metán.
"La idea es que se sientan solos, vacíos y destruidos como nosotros estamos. Queremos que sientan algo, aunque no se acerca ni remotamente, lo que sentimos no-sotros. Ellos destruyeron la inocencia de una niña. No les tenemos miedo y no nos vamos a callar", explicó PR, tía de la menor.
Cabe resaltar, que esta marcha no es la primera, ya que los vecinos y amigos se concentraron en la Fiscalía Penal de Joaquín V. González, Delegación Las Lajitas, para acompañar a la madre y a la tía que prestaron declaración el martes de la semana pasada, a las pocas horas de lo ocurrido en la fatídica madrugada del 1 de enero.
La segunda marcha se concretó el viernes por la tarde, también frente a la comisaría. Además de tener el acompañamiento de los vecinos, medios nacionales estuvieron cubriendo el caso.
"Convocamos a todo el pueblo, ayer (por la marcha del viernes pasado) la gente nos apoyó muchísimo y nos decían que no bajemos los brazos. Pedimos que a esta gente se la juzgue y que no sea un caso más que no se resuelve", señal la tía.
Explicó que temen que el caso quede impuno, no solo porque Las Lajitas todos se conocen y puede haber tráfico de influencia, sino porque se sabe de dos casos de abuso que no tuvieron justicia y no hubo detenidos.
Por esta razón, los familiares quieren, si no entorpece la causa, que el caso sea derivado a Metán o a Salta.
“Si se puede mejor, no queremos ir en contra del juez, no vaya a ser cosa que tome represalias y esconda evidencias. Yo pedí como tía, que el caso lo manejen otras personas para que juzguen los culpables”, sostuvo PR.
La menor estuvo internada desde el lunes hasta el viernes en el hospital zonal.
La mujer explicó que aún desconocen cómo llegó la niña a la casa donde fue ultrajada por los tres hombres en complicidad con la madre de uno de ellos.
Contó que la niña y su familia estuvieron festejado el año nuevo en la casa de la abuela hasta las 3 de la mañana, cuando la chica pidió permiso para ir hasta la plaza, ubicada a una cuadra, para juntarse con a sus compañeros de colegio, acordando volver acompañada por sus amigos a las 4 de la madrugada. Al no regresar, la madre se contactó con los amigos de la joven quienes le indicaron que la ha-bían acompañado hasta la esquina de la casa.
Fue entonces que la familia comenzó a buscar por toda la ciudad, hasta que una vecina le avisó que creía que su hija estaba en la casa donde finalmente apareció.