La mayoría de las víctimas son jóvenes alumnos de formación de las fuerzas del orden situado en el sur de la capital. Como en los años de la violencia del narcotráfico y el conflicto armado, el hecho se produjo en un predio de la policía, la Escuela de Cadetes Francisco de Paula de Santander.
De inmediato la ciudad y el mundo comenzaron a recibir reportes del número de fallecidos. Primero eran 8 muertos después diez, y al final de la noche del jueves 17 de enero, llegaron a 21, las víctimas y a 68 los heridos.
El terror vuelve a teñir de sangre la actualidad en Colombia tras una larga ausencia. Hacía mucho tiempo que Colombia, que está inmersa en un frágil proceso de paz, no sufría una acción terrorista de este tipo.
Por el momento, ningún grupo se ha atribuido la autoría del atentado, que ha sido condenado por la práctica totalidad de las fuerzas políticas. El presidente colombiano, Ivan Duque, que estaba de viaje, ha regresado de inmediato a Bogotá para reunirse con la cúpula militar.
A través de Twitter, el presidente colombiano ha expresado su rechazado y el de todos los colombianos al terrorismo y ha advertido de que "Colombia se entristece, pero no se doblega ante la violencia".
Un coche bomba explotó en la Escuela de Policía General Santander en Bogotá, Colombia. Las autoridades no precisaron de inmediato si las víctimas fatales eran civiles o efectivos de la policía.
Pocos minutos antes del atentado había terminado la ceremonia de ascenso de brigadieres generales de la Policía. Los investigadores no descartan que el ataque hubiera estado dirigido a los máximos oficiales de la institución.
Según la prensa, las primeras versiones señalan que un hombre llegó hasta la portería de la escuela y cuando fue detenido por los controles de seguridad aceleró el vehículo y lo estrelló contra una pared. El conductor está entre los muertos.
Imágenes publicadas en redes sociales mostraron los restos de un vehículo en llamas en el estacionamiento del centro de formación de oficiales de la Policía Nacional y socorristas corriendo por el lugar.
El supuesto autor murió en el atentado
Según informó el fiscal general, quien habría hecho estallar un coche bomba en las cercanías de la escuela policial General Santander en el sur de Bogotá sería José Aldemar Rojas Rodríguez. El sujeto no tiene antecedentes policiales de ningún tipo.
Los colombianos conocieron el nombre y la cara del supuesto autor del atentado contra una escuela policial de Bogotá unas pocas horas después del ataque, pero la prensa local no pudo establecer en lo inmediato una relación entre el hombre y el terrorismo o la política.
Una fotografía del rostro de José Aldemar Rojas Rodríguez fue publicada en los sitios de El Tiempo y Caracol Radio, en ambas casos sin la compañía de datos.
El hombre fue identificado públicamente por el fiscal general Néstor Humberto Martínez, quien tampoco ofreció más información sobre el sospechoso.
Los medios de prensa colombianos dieron por seguro que Rojas Rodríguez murió en el atentado contra la escuela policial General Santander, en el sur de Bogotá, pero esa versión no fue oficialmente confirmada.