Ni bien se inició la evacuación preventiva, habitantes del lugar aseguraron que hubo robos en algunas viviendas dejadas por sus dueños en la emergencia.
El Gobierno indicó que el ministro de Seguridad, Carlos Oliver, supervisó el servicio junto a jefes de cada sector.
Este Ministerio precisó que hasta ayer había 2.352 evacuados en los 11 centros de atención habilitados en Tartagal, Aguaray, Mosconi y Campo Duran por el Comité de Emergencias.
Oliver recorrió parajes afectados por la crecida del río Pilcomayo junto al director de Seguridad de la Policía de Salta, el comisario Enrique Cabrera, y los jefes operativos de cada sector. De los más de 2.300 evacuados alojados en centros de atención, más de mil son niños.
El gobierno indicó que la policía también participa de acciones de asistencia a los pobladores afectados que permanecieron en sus viviendas, o en las de vecinos o familiares. Dijo que en estos casos también se acerca el servicio de salud, se trasladan víveres, vestimenta y cualquier elemento de necesidad básica que requieran los afectados durante los relevamientos diarios que realiza la policía comunitaria.
El ministro Oliver resaltó el trabajo articulado que se lleva a cabo entre los miembros del Comité de Emergencia, el Ejercito Argentino, los municipios involucrados en la contingencia y los pobladores voluntarios, fundamentalmente para la realización de rescates, la limpiezas de caminos, la construcción de un puente provisorio, la contención y distribución de ayuda.
En este sentido señaló que el área de seguridad realiza el servicio las 24 horas en dos turnos. El número de evacuados varía constantemente, porque por un lado llegan más damnificados, pero, por el otro, hay personas que son retiradas del lugar por vecinos o familiares que los albergan en sus domicilios, o porque regresan a sus casas.