Luego de la fuerte desaceleración de precios que midió el INDEC en mayo, el dato de inflación de junio subió al 4,6% y acumuló así, en el primer semestre del año, una variación de casi el 80%.
Las subas en las tarifas de electricidad y gas y en alquiler de la vivienda fueron las que determinaron la aceleración de precios luego de cinco meses de moderación
A nivel de las categorías generales, los precios regulados (+8,1%) lideraron los incrementos, seguidos por los estacionales (+4,4%), mientras que el IPC núcleo dio un 3,7%.
En lo que refiere a los rubros, la división de mayor aumento en el mes fue Vivienda, agua, electricidad, gas y otros combustibles (14,3%). Le siguieron Restaurantes y hoteles (+6,3%) y Educación (+5,7%) por subas en todos los niveles de enseñanza.
La variación interanual fue del 271,5% y, en este caso, desaceleró por tercer mes consecutivo, después del pico del 289,4% en abril. Así, en el primer semestre, la inflación acumuló una variación de 79,8%. En cuanto a la comparativa mensual, si bien el IPC de junio aceleró después de cinco meses de registrar moderaciones, tras la exorbitante suba del 25,5% en diciembre por la devaluación, la medición se ubicó en el menor nivel en 12 meses tras el dato de mayo (4,2%).
Por otra parte, la dinámica de precios estuvo finalmente debajo de lo esperado por el consenso de los analistas participantes en el Relevamiento de Expectativas de Mercado (REM) del Banco Central (BCRA). En el informe de junio, la mediana de la expectativa de inflación esperada fue del 5,2% para el sexto mes del año, por encima del 4,6% que midió el INDEC.
“El dato mensual estuvo claramente influido por el ajuste de gas y electricidad, luego de la pausa de mayo: el componente regulado del IPC trepó 8,1%. De hecho, la inflación núcleo, que deja de lado al componente regulado y al estacional, fue de 3,7% mensual, igual que en mayo”, expresaron desde C&T Asociados. “La incidencia de gas y electricidad hizo que vivienda aumentara 14,3% mensual, el rubro de mayor incremento”, ampliaron.
Desde la misma consultora destacaron que rubros vinculados al turismo (hubo un fin de semana extra largo en junio), como restaurantes y hoteles y recreación y cultura, subieron en torno a 6% mensual. “Salud creció 4,7%, por la suba en medicamentos y el reinicio de los ajustes en prepagas”, ampliaron y destacaron que la división alimentos y bebidas no alcohólicas aumentó 3% mensual, la menor tasa desde noviembre de 2021, a pesar de alzas de 10% o más en algunas regiones.
El dólar llegó a $1.500
El dólar blue llegó a un nivel simbólico clave ese viernes 12 de julio, al tocar por primera vez los $1.500, un nuevo récord nominal histórico, según un relevamiento en las cuevas de la city.
El tipo de cambio informal trepó $35 este viernes y acumuló en la semana un alza de $80 (+5,6%). Se trató de la novedad suba semanal consecutiva. Los dólares financieros, escalaron, pero aún siguen de atrás al blue.
Por ahora, sin embargo, el tipo de cambio más caro es el dólar tarjeta que se ubicó en torno a $1.504, pero el blue le pisó los talones. Apenas $4 de ventaja le sacó, o sea, que cerraron casi iguales.
Así, la brecha con el dólar oficial se posicionó en 62,8%, nivel máximo desde la devaluación implementada en diciembre por el Gobierno de Javier Milei.