Pezeshkian presenta un gabinete que promete cambio en Irán
Pezeshkian presenta un gabinete que promete generar un cambio en Irán, incluyendo una histórica nominación femenina, mientras se enfrenta a un Parlamento conservador.
El presidente de Irán, Masoud Pezeshkian, ha presentado su gabinete ante el Parlamento, destacando una propuesta que podría marcar un cambio significativo en la política exterior y social del país.
Entre las nominaciones más notables está la de Abbas Araqchi como ministro de Asuntos Exteriores y Farzaneh Sadegh como ministra de Carreteras y Vivienda.
Sin embargo, la resistencia dentro del Parlamento conservador ya se ha hecho evidente, poniendo en duda la aprobación de estas propuestas.
En un momento de crecientes tensiones regionales, Pezeshkian ha propuesto a Abbas Araqchi, un diplomático con amplia experiencia, como ministro de Asuntos Exteriores.
Araqchi, conocido por su papel en la negociación del acuerdo nuclear de 2015, tendría la difícil tarea de reanudar las negociaciones con Europa para revitalizar el acuerdo nuclear y aliviar las sanciones impuestas a Irán. “El mundo nos observa y es crucial que busquemos soluciones diplomáticas en lugar de más conflictos”, declaró Araqchi en un comunicado.
Nominación histórica y oposición conservadora
Una de las propuestas más significativas de Pezeshkian es la de Farzaneh Sadegh como ministra de Carreteras y Vivienda.
De ser aprobada, Sadegh sería la primera mujer en ocupar un puesto ministerial en más de una década. Sin embargo, esta nominación ha sido recibida con escepticismo por parte de los legisladores conservadores.
“El Parlamento tiene una responsabilidad con la ley islámica, y debemos ser cautelosos con estos nombramientos”, afirmó un legislador opositor durante la sesión del domingo.
Desafíos internos y externos
Pezeshkian, quien asumió la presidencia tras la muerte del anterior presidente Ebrahim Raisi en un accidente, ha prometido una política exterior pragmática y un enfoque más moderado en asuntos sociales, como el uso del hiyab.
Sin embargo, estas promesas se enfrentan a una fuerte resistencia en un Parlamento dominado por figuras de línea dura.
El presidente también ha nombrado a Eskandar Momeni como ministro del Interior, un puesto clave en la implementación de la normativa sobre el hiyab, y a Mohsen Paknezhad como ministro de Petróleo, en un momento crítico para la economía iraní. “Es imperativo que avancemos con prudencia, pero sin retroceder en nuestros principios”, expresó Pezeshkian en un discurso.
El futuro del gabinete de Pezeshkian dependerá de la aprobación del Parlamento, donde enfrentará un desafío considerable.
A medida que las comisiones parlamentarias comiencen a revisar los nombramientos, la nación y el mundo estarán atentos a si este nuevo gobierno podrá implementar los cambios prometidos o si la resistencia conservadora frenará sus aspiraciones. La evolución de esta situación será clave para el futuro de Irán en un contexto de tensiones tanto internas como externas.