Este martes, en el marco del Mes de la Madre Tierra, diversas organizaciones e instituciones ambientalistas de Salta elevaron una carta dirigida a los titulares de la Cámara de Diputados y Senadores respectivamente, manifestando su profunda disconformidad con la propuesta de actualización del Ordenamiento Territorial de Bosques Nativos (OTBN) de la provincia.
La carta, firmada por múltiples actores comprometidos con la defensa del medio ambiente, alerta sobre el impacto devastador que tendría la nueva zonificación forestal para la biodiversidad y el ecosistema de la región, haciendo hincapié en la controvertida incorporación del color marrón en el otrora semáforo ambiental, que posibilitaría la avanzada de la frontera agropecuaria, entre los principales y preocupantes efectos.
Las organizaciones destacan que la propuesta del OTBN permitiría el desmonte de 721.568 hectáreas adicionales de bosques, una medida que consideran regresiva y contraria a los principios de la Ley Nacional 26.331, que establece la protección de los bosques nativos. El documento critica la recategorización de áreas protegidas, señalando que terrenos previamente clasificados en categorías más restrictivas han sido degradados para permitir su explotación. En particular, se denuncia la desprotección de zonas sujetas a procesos judiciales, lo que, según los ambientalistas, premia conductas ilegales de desmonte. Uno de los casos más graves, según la presentación, es la reclasificación del área en las Yungas de San Lorenzo, donde se desarrolla un proyecto urbanístico que afecta una reserva hídrica estratégica. Además, la creación de la categoría “marrón”, no contemplada en la Ley Nacional de Bosques, genera preocupación, ya que abre la puerta a la devastación sin control del medio ambiente.
Las organizaciones también expresaron su descontento con la falta de participación ciudadana en el proceso de actualización del OTBN. En particular, denunciaron la exclusión de las comunidades indígenas, que no han sido consultadas de acuerdo con lo estipulado en la Ley Nacional 26.160 y tratados internacionales. Las comunidades indígenas han sido históricamente guardianas de los bosques, y su conocimiento es fundamental para la conservación sostenible de los recursos naturales.
Finalmente, solicitaron una reunión formal en la Legislatura para debatir sobre esta situación crítica y detener la implementación del nuevo proyecto. Advirtieron que, de seguir adelante sin las correcciones necesarias y sin garantizar la participación ciudadana, presentarán denuncias y acciones de inconstitucionalidad para proteger los derechos ambientales y la biodiversidad de Salta.
Protestas en la Legislatura
Durante la presentación de las objeciones en la Legislatura, se llevaron a cabo manifestaciones de diversas organizaciones a las puertas del edificio. A través de una protesta pacífica, los activistas exigieron la suspensión del nuevo OTBN y la realización de una nueva mesa de diálogo multisectorial. Dichas manifestaciones fueron acompañadas por consignas y pancartas que denunciaban la omisión de consultas previas, libres e informadas a las comunidades indígenas afectadas por el ordenamiento territorial. La protesta fue registrada en un reel publicado en Instagram, donde se puede observar a los manifestantes expresando su rechazo de manera activa frente a las autoridades legislativas. Entre los cuestionamientos se resalta la categorización de áreas como “marrón”, una categoría que no está contemplada en la Ley Nacional de Bosques y que facilitaría una mayor devastación ambiental.