JudicialesSaltaSeguridad

El plan narco tenía previsto matar al procurador y a otras figuras importantes

Con la detención del intendente de Aguas Blancas y la intervención del citado municipio, sumado al futuro jury de enjuiciamiento del también detenido juez Claudio Parisi, cobró nuevo impulso lo denunciado por el Procurador General de la Provincia en relación a la conspiración armada por un narco alojado en la cárcel de Villa Las Rosas para mandar a matarlo.

Es así que, finalmente esos hechos se conocieron -primero- en el programa radial Hora de Voces de FM Ya con los periodistas Juan Pablo Vázquez y Lucía Soria y luego en una conferencia de prensa del Procurador, que aclaró muchos temas que estaban “cajoneados” para la ciudadanía por secreto de investigación.

El disparador o la visualización de la punta del iceberg del mundo narco, la dio el propio gobernador Gustavo Sáenz que puso sobre la mesa la problemática del crimen organizado en la frontera norte de nuestro país y una firme decisión junto a la Ministra de Seguridad de la Nación de combatir el avance de las apetencias expansivas del narcotráfico, y comentó que el Procurador tenía custodia de Gendarmería Nacional, en ocasión de la apertura de la reunión del Consejo Federal de Seguridad.

Esa información no pasó desapercibida para muchos periodistas y Nuevo Diario pudo reflejar en la nota titulada “U$S 100.000 por la cabeza del Procurador García Castiella”, un poco más en profundidad lo que se comenta en el mundo de la delincuencia, en sus niveles más altos. Esta noticia cobró relevancia ya que no fue desmentida ni siquiera por el Procurador García Castiella.

Así se supo que, desde la cárcel, un conocido criminal, también imputado en asesinatos fue quien ofreció los U$S 100.000 por su asesinato. Para ello, se comenta, que ese monto se habría ofrecido a sicarios de Tucumán, Santiago del Estero y Córdoba.

La aparición de esa información en Nuevo Diario tuvo un efecto expansivo puertas adentro de la penitenciaría local en sus “inquilinos”, que hicieron llegar -anónimamente- a la redacción del “diario chiquito”, otras versiones no desmentidas por exfuncionarios de la fuerza policial allegadas al quehacer periodístico.

Es así que, luego de recabar información por distintos medios y actores no oficiales, se logró armar una secuencia informativa sobre este tema, que resulta -prácticamente- un guión, para una película -de terror- por lo que se pudo conocer.

Asimismo, el personal de las fuerzas policiales que habría trabajado en el proceso de inteligencia realizado, no negaron las consultas y planteos expuestos por el periodista de este matutino sobre esas versiones. “El que calla otorga”.

Plan caótico

Tal como se puede presumir de los sucesos, Palavecino pasaría a ser el posible mentor del plan conspirativo en contra del Procurador Pedro García Castiella, y tendría en mente dos premisas para llevar adelante: su fuga y la muerte del Procurador; según versiones, por motivos de venganza, por considerarlo el responsable de su encarcelamiento y el de su esposa.

Para la primera parte de su plan y según comentarios de cercanos, estuvo “comprando” voluntades dentro y fuera del penal desde su celda, la 104 del pabellón G, y que ya tendría tres “coordinadores” externos. Uno de ellos, L.D.A., un ex policía, A.I.E., figura en el Boletín Oficial de la República Argentina por una causa en Aduana del año 2018 y un ladrón detenido en Orán en noviembre de 2017, actualmente los tres en libertad, y alguno prófugo de la justicia. En cuanto a su logística interna, cuentan que controla el pabellón, que mantiene liderazgo con varios de los internos de la unidad carcelaria, quienes le proveen de yerba mate, cigarros e incluso le realizan llamadas en su nombre. Su plan de fuga cuenta con dos opciones: “llenar” de droga el penal para que armen conflictos simultáneos y que como en Villa Las Rosas no cuentan con tanto personal, tomar el pabellón y fugarse. Para esto tendrían armas ya conseguidas, lo que proyectaría una fuga a “fuego y sangre”.

La otra alternativa es volar el muro perimetral de la cárcel ya que contarían con armas “grandes”, que habrían logrado ya hacer ingresar ilegalmente a la provincia, con el apoyo logístico de su grupo de coordinadores externos. Esta opción también refleja el “poder” que maneja este preso, que no le importaría el daño colateral que podría provocar esta decisión.

Semanas anteriores el portal informativo Infobae, publicaba un video donde se observaba explosivos en poder de esta organización “Esto es TNT. Estoy con mecha lenta. Este tiene un fulminante. Se puede. Aparte se puede pedir que te preparen el… ¿Cómo se llama esto?… Los detonadores electrónicos de todas las distancias con control remoto” video extraído según el portal digital, del celular de Cristian Gabriel “Gringo” Palavecino, sindicado jefe de “la banda de sicarios”

Para la segunda parte de ese macabro plan, asesinar al Procurador general de la Provincia, Pedro García Castiella, desde el momento mismo de su detención “ordenó” un trabajo de seguimiento y logística para obtener toda la información sobre el movimiento del funcionario judicial, su rutina, su desarrollo laboral y hasta su actividad personal; a su vez, el Procurador obtuvo indicios sobre movimientos “extraños”, donde ahí se entiende el por qué esté custodiado por Gendarmería Nacional. Paralelamente, el preso de la 104, habría ofrecido el trabajo de eliminar al Procurador a sicarios de Tucumán, Santiago del Estero y Córdoba, los que no habrían aceptado por resultar una figura importante en el quehacer judicial de Salta.

Lo realmente alarmante de este supuesto plan es que Pedro García Castiella no sería el único apuntado a eliminar en este desequilibrado propósito. En el plan de eliminar personas surgieron nombres como el de Darío Monges (ya asesinado de 5 disparos). Darío Monges con vínculos con Benjamín Cruz cuando ocupaba el cargo de secretario en el Ministerio de Seguridad y que quedó en evidencia meses antes del crimen, cuando Monges ingresó al penal de Orán -en forma irregular – y haciéndose pasar por abogado asesor del Ministerio de Seguridad y Justicia- para entrevistarse con el sicario Oscar “Cabezón” Díaz, a quien le habría prometido favores. Aquella gestión de Monges en la Unidad Carcelaria 3 de Orán trascendió a la prensa y terminó costándole el puesto a él y a su jefe en junio de 2022. Benjamín Cruz encontró refugio en la Municipalidad de la ciudad de Salta, bajo la gestión de Bettina Romero, quien antes de dejar la Intendencia lo propuso para el puesto de juez del Tribunal de Cuentas, solicitud que avaló el Concejo Deliberante de Salta.

Benjamín Cruz, abogado, otro de los nombres que surgieron en esta historia, está siendo investigado junto a Ángel Sarmiento por el “extraño” ingreso de Darío Monges, haciéndose pasar por abogado, a la unidad carcelaria cuando era Secretario de Seguridad, para que entrevistara en la cárcel a Oscar Alberto Alejandro Díaz, alias “Cabeza”, “Cabezón” o “El Ale”, de 31 años, yerno del capo narco Raúl “Coya” Rojas y vinculado a Cristian “El Gringo” Palavecino. Díaz admitió su culpabilidad en el sicariato y hasta pidió perdón a la viuda de Marcelino “Chapaco” Valdez Cari, la víctima por la que fue condenado.

Este personaje fue detenido en mayo de 2022 en Bolivia, luego de permanecer prófugo dos años. En el juicio por el crimen de Darío Monges declararon investigadores de la Policía provincial y de la Gendarmería, los que dejaron algunos interrogantes; como que nadie investigó hasta ahora las

vinculaciones entre Darío Monges con Cristian Palavecino.

También indicaron las fuentes de inteligencia que “Palavecino” está “fuera de sus cabales” y posee ideas delirantes, como tomar la frontera.

En su lista macabra surgen también otros nombres, de figuras importantes, de inexplicable o confusa relación.

Entre otros datos que -obviamente- no pueden certificarse, está el de que, en los últimos procedimientos de incautación de droga con el sello de la figura de un delfín, quien estaría detrás de estos envíos sería -nada más y nada menos- que el peligroso Cristian Palavecino, aunque esté en la cárcel.

Dimas Ruiz, amigo de Palavecino

El narcotraficante y asesino Cristian “Gringo” Palavecino, nacido el 7 de julio de 1988, líder de una organización narcocriminal, acusado de homicidios, “mexicaneadas” y de un golpe comando a la empresa Abra del Sol de la que se llevaron una cifra superior a u$s 300.000, en complicidad con el ex contador y socio de la firma, y ex candidato a intendente de la ciudad de Orán José “Oso” Dímas Ruiz, quien mantenía diálogo con Palavecino, en los que manifestaba que “(él) iba a ser Intendente y que trabajarían juntos hasta el fin de sus días”, mientras que este último le replicaba, “yo lo voy a ayudar para que sea intendente, yo lo voy a ayudar, pero usted ayúdeme a liberar a mi hijo, porque sino, nos vamos a tener que enfrentar, y usted no va a ser ni intendente y vamos a terminar todos en “canadá”, esto surge de audios registrados por el narcotraficante y luego dados a conocer a la prensa. Este diálogo confirmaría lo planteado por García Castiella cuando sentenció que el poder narco buscaba apoderarse de las intendencias de la frontera.

Situación actual del “Gringo”

Ante lo expuesto y con la finalidad de garantizar la seguridad Institucional, de la población penal, del personal y evitar cualquier situación de riesgo que atente contra la seguridad pública se hizo el requerimiento en “carácter de urgente” a los titulares de los Juzgados y Tribunales intervinientes.

El pedido fue elevado por el Ministerio de Seguridad y Justicia de la Provincia a los Tribunales de Juicio de las Salas I y II de Orán por estrictas razones de seguridad ante el grado de peligrosidad del procesado provincial y las vinculaciones que tendría con organizaciones criminales.

El Ministerio de Seguridad y Justicia por medio de la Subsecretaría de Políticas Penales y de la Dirección General del Servicio Penitenciario Provincial, el 26 de setiembre solicitó a los Tribunales de Juicio de las Salas I y II de Orán el traslado del procesado provincial Cristian Gabriel Palavecino a un lugar de detención de máxima seguridad fuera del ámbito penitenciario de Salta, por estrictas razones de

seguridad, ya que la cárcel de Villa Las Rosas, donde se encuentra alojado, no cuenta con un pabellón para alojar internos de “Alto Perfil”.

La Unidad Carcelaria de Villa Las Rosas es un lugar de alojamiento de mediana seguridad por lo que en el marco de la Reunión del Consejo Federal de Seguridad Interior, que se llevó a cabo en Salta, la cartera Provincial inició gestiones ante el Ministerio de Seguridad de la Nación para articular acciones de cooperación que posibiliten, en el menor tiempo posible, el traslado de Palavecino a una dependencia carcelaria con pabellón de Alto Perfil en el marco del Sistema Integral de Gestión para Personas Privadas de la Libertad de Alto Riesgo que presentó la ministra, Patricia Bullrich meses atrás.

Al respecto de este pedido, cabe acotar que el penal de Ezeiza es el de mayor seguridad, sin embargo, se espera la resolución del juez de Orán para que se le otorgue lugar de detención, ya que los fiscales, desde el pasado lunes de la semana anterior contestaron favorablemente al ser consultados.

Mientras se define el traslado de Palavecino, el norte provincial sigue generando información y dando muestras de “anormalidades” de corrupción, aún entre miembros de las fuerzas de Seguridad, quizás ratificando el dicho: “Si no puedes con tu enemigo, únete a él”.

Todo esto sucede, pero García Castiella sabe contra quiénes pelea.

Volver al botón superior