El proyecto de litio Doncella, impulsado por la empresa de capitales chinos Hanaq Group, alcanzó un hito clave al obtener la aprobación de la Declaración de Impacto Ambiental (DIA) por parte del Gobierno de Salta.
Este paso permitirá a la compañía avanzar en la construcción de su primera planta de carbonato de litio en la provincia, con una capacidad inicial de producción de 3.000 toneladas anuales.
La empresa espera comenzar la construcción de la planta hacia finales del primer trimestre de 2025, una vez que se confirme el financiamiento necesario.
En diálogo con la Cámara de la Minería de Salta (CMS), Martín Andreatta, Chief Lithium Officer de Hanaq Group, brindó detalles sobre el futuro del proyecto y las proyecciones de la empresa.
La aprobación del DIA, obtenida el pasado 17 de septiembre, no solo reafirma la viabilidad del proyecto, sino que también subraya el compromiso de Hanaq Group con la sostenibilidad. “Este es un paso fundamental que nos permite avanzar hacia la construcción de la planta piloto de 3.000 toneladas anuales de carbonato de litio grado batería”, destacó Andreatta.
Actualmente, la subsidiaria Hanacolla está gestionando el financiamiento necesario para comenzar con la fase piloto. Además, la empresa está llevando a cabo un estudio de factibilidad para una segunda fase, que incrementaría la capacidad de producción a 25.000 toneladas anuales. Esta expansión permitiría inscribir el proyecto en el Régimen de Incentivo a las Grandes Inversiones (RIGI).
De acuerdo a Andreatta, el proyecto Doncella utilizará tecnología de Extracción Directa de Litio (DLE), proporcionada por la empresa china Sunresin, la cual cuenta con amplia experiencia en la industria. Este método de extracción a través de resinas es más eficiente que los tradicionales procesos de evaporación, ya que optimiza la recuperación de litio y reduce el impacto hídrico y ambiental. “La tecnología DLE es ideal para procesar salmueras con bajas concentraciones de litio, como es el caso del Salar de Arizaro, lo que amplía el potencial de explotación de este vasto yacimiento”, explicó.
Actualmente, el proyecto cuenta con 50 empleados directos, pero se espera que esa cifra crezca significativamente. Durante la fase de construcción de la planta piloto, el número de empleados directos alcanzará las 350 personas, y el empleo indirecto se estima en alrededor de 1.000 personas. “Para la etapa de operación, proyectamos una dotación de 150 empleados, quienes desempeñarán tareas en diversas áreas, desde la planta procesadora hasta los servicios auxiliares”, agregó Andreatta.