Corea del Sur prohíbe salir del país al presidente Yoon tras aplicar ley marcial
El mandatario enfrenta acusaciones de rebelión y podría ser detenido. La breve declaración de la ley marcial desató una crisis política e internacional.
El Ministerio de Justicia de Corea del Sur prohibió al presidente Yoon Suk Yeol viajar al extranjero. La medida responde a investigaciones por acusaciones de rebelión tras la controvertida aplicación de la ley marcial la semana pasada.
El decreto, que desplegó tropas en Seúl, duró solo seis horas antes de ser rechazado por la Asamblea Nacional. Sin embargo, el incidente desencadenó denuncias de un “golpe de Estado” por parte de la oposición y aumentó las tensiones con los aliados internacionales de Corea del Sur.
Bae Sang-up, representante del Ministerio de Justicia, confirmó que la prohibición de viajes se dio por solicitud de la policía, los fiscales y una agencia anticorrupción.
“Si Yoon intenta evadir la medida, puede ser detenido”, declaró un funcionario de la policía nacional a medios locales.
Aunque los presidentes en funciones gozan de inmunidad en Corea del Sur, esta no se aplica en casos de rebelión o traición. Esto significa que Yoon podría ser arrestado mientras está en el cargo, aunque analistas dudan de que la policía intente detenerlo en la Oficina Presidencial, donde cuenta con protección militar.
Detenciones y suspensiones
El domingo, los fiscales detuvieron al exministro de Defensa Kim Yong Hyun, acusado de recomendar la declaración de la ley marcial. Además, tres comandantes militares fueron suspendidos por su presunta participación en el decreto.
La oposición presentó denuncias contra Yoon y otros funcionarios, calificando sus acciones de “inconstitucionales” e “ilegales”.
Respuesta de Yoon y el oficialismo
El sábado, Yoon se disculpó públicamente, prometiendo no eludir responsabilidades legales o políticas. “Dejaré en manos de mi partido las decisiones sobre mi mandato y el rumbo del país”, afirmó.
El Partido del Poder Popular, que respalda a Yoon, enfrenta una fuerte presión. Según su líder, Han Dong-hun, se buscará una transición “ordenada” del presidente para evitar un colapso político.
Mientras tanto, expertos advierten que el partido oficialista podría estar ganando tiempo para recuperar apoyo popular antes de una posible elección anticipada.
La crisis resalta las divisiones políticas en Corea del Sur, mientras el país enfrenta interrogantes sobre la estabilidad de su democracia.