Tensión por Groenlandia entre Dinamarca y Trump
La primera ministra danesa, Mette Frederiksen, conversó con Donald Trump sobre el futuro de Groenlandia. Reafirmó que la isla decidirá su destino.
Trump considera clave el control de Groenlandia para la seguridad de Estados Unidos. No descartó medidas económicas ni militares para lograrlo.
Antes de Navidad, su hijo visitó la isla como “turista”. El miércoles, ambos líderes hablaron por teléfono durante 45 minutos. Trump no retiró sus amenazas comerciales. Frederiksen calificó la situación como “seria”.
“No queremos conflictos con Estados Unidos, pero estamos trabajando con empresas y colegas europeos”, dijo en una rueda de prensa.
Dinamarca teme sanciones económicas. Estados Unidos es su mayor mercado de exportación. Empresas danesas como Novo Nordisk, Pandora, Lego, Carlsberg, Vestas y Orsted se reunieron con la primera ministra para evaluar posibles consecuencias comerciales.
Trump no comentó públicamente sobre la llamada. Sin embargo, compartió en Truth Social una encuesta de 2019 donde el 68% de los groenlandeses apoyaba la independencia.
Además el primer ministro de Groenlandia, Mute Egede, también habló sobre el tema. “Queremos colaborar con Estados Unidos en defensa y minería, pero Groenlandia no está a la venta”, afirmó.
Dinamarca ha declarado que respetará cualquier decisión de la isla. Groenlandia, con 2,2 millones de kilómetros cuadrados y cubierta en un 80% por hielo, es un punto estratégico con valiosos recursos minerales. El futuro del territorio sigue en debate. Las tensiones entre Copenhague y Washington podrían aumentar si Trump insiste en su plan.