El Papa Francisco donó sus últimos €200.000 para apoyar la reinserción de jóvenes presos

Poco antes de su fallecimiento, el papa Francisco entregó sus últimos ahorros personales para saldar la hipoteca de una fábrica de pasta en un centro penitenciario juvenil de Roma, reafirmando su compromiso con los más vulnerables.
En sus últimos días, el papa Francisco realizó una significativa donación personal de €200.000, destinada a ayudar a presos, en particular al centro penitenciario para menores Casal del Marmo, en Roma.
Según Benoni Ambarus, obispo y responsable de la pastoral carcelaria, estos fondos se utilizarán para cubrir una hipoteca de la fábrica de pasta del penal, lo que permitirá reducir precios, incrementar ventas y crear más oportunidades laborales para los jóvenes internos.
Este acto final del pontífice se alinea con su constante defensa de la dignidad de los presos durante sus más de doce años de papado.
Francisco realizó numerosas visitas a cárceles y destacó su importancia en actos clave, como la apertura de la Puerta Santa en la cárcel de Rebibbia, en Roma, como parte del Jubileo.
Un llamado a la esperanza y la reinserción
La donación del papa Francisco no solo representa un apoyo económico, sino también un mensaje de esperanza y confianza en la capacidad de reinserción de los jóvenes privados de libertad. Al cubrir la hipoteca de la fábrica de pasta, se busca generar un entorno que promueva la formación laboral y la dignidad de los internos, brindándoles herramientas para una vida mejor al salir en libertad.
Este último gesto del pontífice argentino reafirma su compromiso con los más desfavorecidos y su convicción de que la misericordia y la justicia deben ir de la mano en la construcción de una sociedad más inclusiva y solidaria.
Fuente: Ámbito Financiero