Trabajan por el derecho a la identidad vulnerado en casos de abusos
La Asesoría de Incapaces de Embarcación impulsa distintas acciones para garantizar el derecho a la identidad de niños, niñas y adolescentes de la zona.
Entre otras intervenciones, continúa el trabajo para inscribir a hijos no reconocidos cuyas madres fueron víctimas de abuso sexual en comunidades originarias e hijos de personas con consumos problemáticos.
“La Convención sobre los Derechos del Niño establece el derecho a la identificación y al nombre, lo que abre la puerta a saber quiénes somos, acceder a la educación y tener todos los beneficios sociales que ofrece el Estado”, afirmó José Eduardo Cortez, asesor de Incapaces de Embarcación.
Vivir en comunidades de difícil acceso y alejadas de los centros urbanos, ser hijos de padres que no los reconocieron o estar a cargo de progenitores que sufren adicción, son algunas de las realidades por las que muchos chicos no son anotados en tiempo y forma en el Registro Civil.
En este sentido, el asesor manifestó que continúa un trabajo que se inició el año pasado en Pluma de Pato, en conjunto con la Defensoría Oficial, para garantizar el derecho a la identidad de niños, niñas y adolescentes que nacieron como producto de violaciones a mujeres de la zona o cuyas madres fueron abandonadas por los progenitores.
Rebecca Russo, secretaria letrada de la Asesoría de Incapaces de Embarcación, explicó que hubo casos en que las madres víctimas de abuso o abandono, no querían impulsar un proceso legal pero sus hijos sí. “Hablamos de adolescentes de 14 o 16 años que nos pidieron iniciar la demanda para ser reconocidos por sus progenitores. Nos decían, por ejemplo, que querían estudiar una carrera y para eso necesitaban el apoyo de sus padres biológicos”, comentó.
La funcionaria recordó que, desde que entró en vigencia la Convención sobre los Derechos del Niño, los niños, niñas y adolescentes son sujetos de derechos que pueden hacer valer, independientemente del deseo de sus padres, y uno de ellos es la identidad. Russo indicó que se realizan visitas periódicas a Pluma de Pato, Coronel Juan Solá, Morillo y Los Blancos para relevar situaciones. “Es necesario que nos acerquemos, porque para ellos no es fácil trasladarse. Estamos hablando de casi 200 kilómetros de zonas inhóspitas. Entonces es más accesible para ellos la información si nosotros nos constituimos en el lugar”, describió.
Indicó que también hay casos en que los chicos no tienen su DNI porque están a cargo de madres solas que sufren adicciones y no completan los trámites de inscripción.