Salta busca adherir a la Ley Olimpia para sancionar la violencia digital contra las mujeres

La diputada provincial Alejandra Navarro presentó un proyecto para que Salta adhiera a la Ley Olimpia, una normativa nacional que establece sanciones por la difusión y destrucción de material digital íntimo sin consentimiento.
En diálogo con Nuevo Diario, la diputada provincial por el departamento Alejandra Navarro comentó acerca del proyecto que presentó para que Salta adhiera a la Ley Olimpia, una normativa nacional que busca sancionar la violencia digital por razones de género, especialmente la difusión y destrucción de material íntimo sin consentimiento.
“La Ley Olimpia es una herramienta que visibiliza y sanciona las agresiones digitales que sufrimos las mujeres en todos los ámbitos. Desde la difusión de imágenes hasta la generación de contenidos que circulan en redes o grupos privados y que causan un daño enorme”, explicó Navarro.
La diputada remarcó que esta legislación complementa la Ley 26.485 de Protección Integral hacia las Mujeres, al enfocarse específicamente en el ámbito digital.
“Se trata de preservar los derechos de las mujeres, de evitar que estas situaciones queden impunes y de ofrecer canales claros para la denuncia y la protección”, agregó.
Navarro retomó el espíritu de la normativa nacional sancionada en 2023, que la activista mexicana Olimpia Coral Melo impulsó tras ser víctima de violencia digital. La diputada destacó la necesidad de dar una respuesta concreta a situaciones que ya ocurren en la provincia.
“Que Salta adhiera a esta ley es clave. Muchas veces estos hechos se naturalizan, se esconden en plataformas digitales donde es difícil actuar sin una legislación clara. Esta ley viene a dar ese respaldo legal y simbólico a las mujeres que atraviesan este tipo de violencia”, expresó Navarro.
El proyecto se encuentra en tratamiento legislativo y se espera que convoque el respaldo de organizaciones feministas y de derechos digitales, que desde hace años reclaman una legislación acorde al avance de las tecnologías y las nuevas formas de violencia.