Salta vive el Tiempo del Milagro con la entronización del Señor y la Virgen

La entronización de las imágenes sagradas marcó el inicio del calendario litúrgico más importante de la provincia. Monseñor Cargnello llamó a fortalecer la oración, la reconciliación y el compromiso con los hermanos. Las imágenes presidirán la Catedral hasta el 15 de septiembre.
En una jornada cargada de emoción y recogimiento, Salta dio inicio al Tiempo del Milagro con la entronización de las sagradas imágenes del Señor y la Virgen del Milagro, en una ceremonia que reunió a miles de fieles en la Catedral Basílica.
El acto litúrgico, presidido por el arzobispo Mario Antonio Cargnello, abrió formalmente el camino espiritual que culminará el 15 de septiembre, con la solemne procesión que cierra las celebraciones patronales más importantes del calendario religioso salteño.
Desde horas tempranas, el templo mayor de la ciudad comenzó a recibir a devotos y peregrinos que, como cada año, renuevan su fe con lágrimas, oraciones y pañuelos blancos al aire.
La ceremonia comenzó a las 16.15 con una presentación de la historia del Milagro Salteño en varios idiomas y en lengua de señas, continuó a las 17.30 con el rito de entronización y finalizó con la celebración eucarística a las 19.00, que fue transmitida en vivo para toda la provincia.
El momento culmine fue cuando las imágenes del Señor y la Virgen fueron colocadas en el altar mayor de la Catedral, desde donde presidirán todas las celebraciones litúrgicas hasta mediados de septiembre.
Este gesto simbólico no solo representa el inicio del tiempo de novena, sino también la apertura de una etapa profundamente esperada por los salteños, que encuentran en el Milagro una fuente de esperanza y unidad.
Durante su homilía, Monseñor Cargnello reflexionó sobre el significado del rito y llamó a los presentes a vivir el Tiempo del Milagro como una verdadera oportunidad de transformación interior. “Y el gesto de la entronización es un gesto de Él, nos visita, Ella nos visita. Y entonces estamos desafiados nosotros a hacer de nuestro Tiempo del Milagro una oportunidad para crecer en el vínculo con Dios, con la Virgen y con los hermanos”, expresó.
Cargnello también hizo hincapié en el llamado a intensificar la vida espiritual, a reconciliarse con Dios y a practicar la caridad activa. “Estamos llamados a rezar un poco más, a escuchar la palabra de Dios, a buscarla, y al mismo tiempo a expresar esa fe en el cuidado del hermano. Salta nos lo enseña en la forma en que recibe a los peregrinos, a los turistas, al que viene y espera una respuesta”, dijo ante una Catedral colmada.
El arzobispo evocó además el mensaje del Papa Francisco, recordando que este año se celebra el Año de la Esperanza y animó a los presentes a ser “peregrinos y testigos de la esperanza”.
La celebración del Milagro tiene su origen en el año 1692, cuando un fuerte terremoto azotó la región. Según la tradición, el sismo se detuvo tras la aparición de la imagen del Señor crucificado.
Durante este tiempo, se espera que escuelas, parroquias, organizaciones sociales e instituciones públicas y privadas visiten la Catedral para rendir homenaje a los santos patronos.