Confirman dos nuevas muertes por dengue en la provincia
El Ministerio de Salud Pública informó ayer viernes dos nuevos decesos de personas diagnosticadas con dengue, con lo que la cantidad de defunciones asciende a 14.
Un caso corresponde a un varón mayor de 80 años, residente en la ciudad de Salta, fallecido el martes 2.
La otra persona es una mujer mayor de 60 años, residente en Rosario de la Frontera, cuyo deceso se produjo el jueves 4.
En ambos casos, el diagnóstico de dengue fue confirmado por laboratorio y se analizan las comorbilidades.
La cartera sanitaria provincial recuerda la importancia del autocuidado personal para evitar la picadura del Aedes aegypti, como también las medidas para eliminar los reservorios del mosquito en el interior de las viviendas, evitando la acumulación de agua en todo recipiente u objeto.
Otra recomendación es acudir a la consulta médica de manera temprana. La persona que tiene fiebre alta y de pronto experimenta un brusco descenso de la temperatura, si tiene náuseas o vómitos, intolerancia a los líquidos, o algún tipo de sangrado, sea por nariz, encías, etc, debe consultar en un servicio de salud, porque la enfermedad ha entrado en una etapa de gravedad.
También, es de suma importancia que la persona con síntomas se hidrate en forma permanente, aunque no sienta sed, que no se automedique y que tome los medicamentos que le indique un profesional.
Consultorios febriles
En la ciudad de Salta están funcionando consultorios específicos para pacientes febriles en los siete centros de salud cabecera de nodo: Castañares; Villa Primavera; Nº 63, de Sarmiento 655; El Manjón; Intersindical; Solidaridad y Villa Lavalle. El horario de atención en estos lugares es de 8 a 20 hs, para lo cual se han reforzado las guardias con profesionales médicos de los hospitales San Bernardo, Arturo Oñativia, Señor del Milagro y Papa Francisco.
Destacan la actividad física para cuidar la salud
El 6 de abril es el Día Mundial de la Actividad Física y el 7 de abril, el Día Mundial de la Salud. Ambas fechas están íntimamente relacionadas, ya que la actividad física constituye un factor de protección frente a muchas enfermedades y un componente esencial de la calidad de vida para personas de todas las edades. La Organización Panamericana de la Salud (OPS) afirma que “la actividad física insuficiente se ha identificado como uno de los principales factores para la mortalidad global y se encuentra en aumento en muchos países”.
Agrega que “la actividad física regular y adecuada, incluido cualquier movimiento corporal que requiera energía, puede reducir el riesgo de muchas enfermedades y trastornos no transmisibles, como la hipertensión, la enfermedad coronaria, los accidentes cerebrovasculares, la diabetes, el cáncer de mama y colon y la depresión”.