Provincia y Nación impulsan un modelo federal de salud basado en articulación y tecnología
El ministro de Salud Pública de Salta, Federico Mangione, se reunió con el titular de la cartera sanitaria nacional, Mario Lugones.
El encuentro se desarrolló en el marco de la reunión del Consejo de Obras y Servicios Sociales Provinciales de la República Argentina (COSSPRA), celebrada en la ciudad de Salta, donde se abordaron los principales desafíos federales del sistema sanitario, con foco en la articulación interinstitucional y la incorporación de tecnología como herramientas para mejorar la equidad en la atención.
Mangione destacó que el eje de la gestión sanitaria debe orientarse hacia un modelo de riesgo compartido, en el que las responsabilidades se distribuyan equitativamente entre los sectores público y privado.
“El objetivo es que ambos traccionen en la misma dirección, garantizando la sostenibilidad del sistema y el acceso igualitario a la salud”, señaló.
El caso Salta: tecnología y redes que salvan vidas
Durante la jornada se presentó el panel “Redes Provinciales para la Atención del ACV Isquémico”, organizado por Boehringer Ingelheim, con la participación de los ministros de Salud de Salta y Chaco, y del presidente de OSEP Mendoza, Carlos Funes.
En su intervención, Mangione destacó la experiencia de Salta como ejemplo de interconexión exitosa entre hospitales a través del sistema “Safesa” (Salud Federal Salta), que integra historias clínicas digitales y telemedicina. Esta herramienta, explicó, ha permitido mejorar el pronóstico de pacientes con ACV en localidades alejadas como Rosario de la Frontera, Cafayate, Orán, Tartagal y Metán, pese a la falta de especialistas y las dificultades geográficas.
“Estamos enfrentando una provincia de 155 mil kilómetros cuadrados, con temperaturas extremas y escasa infraestructura vial. La tecnología nos permite salvar vidas y avanzar hacia una salud pública unificada e igualitaria”, afirmó Mangione.
Una visión federal y colaborativa
El ministro de Salud de Chaco, Sergio Rodríguez, coincidió en la necesidad de transformar la concepción del gasto en salud en una inversión productiva, destacando la importancia de la articulación público-privada.
“La salud es un derecho de la gente, no del financiador”, subrayó.
Su provincia implementó una red de tomógrafos en puntos estratégicos mediante inversión mixta, acompañada de sistemas de telemedicina para garantizar acceso en zonas donde el Estado es el único prestador.
Por su parte, Carlos Funes, titular de COSSPRA y de OSEP Mendoza, planteó que la eficiencia del sistema exige una mirada global y justicia en la financiación. Cuestionó que los fondos de las obras sociales se utilicen para cubrir prestaciones de seguridad social, desviando recursos destinados a la atención médica.
“No podemos seguir sosteniendo un sistema que penaliza a las obras sociales por cubrir lo que no les corresponde. La equidad también implica financiar con justicia”, sostuvo Funes.
Salud integrada y sostenible
El panel, moderado por la coordinadora de la Red de ACV de Salta, Gabriela Orzuza, concluyó que la sostenibilidad del sistema de salud argentino depende de tres pilares fundamentales: la articulación público-privada, la inversión tecnológica estratégica y la revisión de los mecanismos de financiamiento.
Los ministros coincidieron en que la atención eficiente de patologías tiempo-dependientes, como el ACV, requiere redes integradas, tecnología de información sanitaria y políticas federales de cooperación que garanticen igualdad de acceso en todo el territorio nacional.
“El futuro de la salud pública está en la interconexión, la planificación y el trabajo conjunto. Ninguna provincia puede avanzar sola”, concluyó Mangione.