La salida de Fornasari no movió el avispero
La repentina salida del entrenador Pablo Fornasari de Central Norte si bien fue sorpresiva, ha sido tomada con mucha naturalidad en el mundo azabache.
Se podría resumir, en un dicho popular, que la partida del entrenador “no movió el avispero”.
Esto por varias razones. La primera, la dirigencia aceptó esta salida sin mayores observaciones más allá de que el entrenador tenía un contrato con la institución azabache hasta fines del 2026. También es cierto que por el lado de la directiva había un atraso con Fornasari en unos pagos.
Esta situación entró en consideración cuando se entabló la negociación para su salida, como así también el resarcimiento económico por provocarle un perjuicio al club al no respetar lo convenido.
Vale aquí aclarar que el técnico es quien tomó la determinación de rescindir su contrato por haber aceptado una propuesta superadora de Racing de Córdoba.
Si bien la dirigencia podría haberle reclamado el hecho de haberse comprometido en el armado del futuro plantel, la mayoría de las decisiones habían sido consensuadas por ambas partes.
En segundo lugar, la campaña de Fornasari fue de mayor a menor, solamente se puede destacar que sacó los puntos necesarios para mantener la categoría pero lejos estuvo de conseguir que el equipo cautive a sus hinchas por el juego.
Esto se ha visto reflejado en la opinión de los hinchas que se han concentrado más bien en saber quién lo sucederá.