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El intendente Ramos con un duro comunicado contra la concejala Jorge

El intendente de Rosario de Lerma, Sergio “Topo” Ramos, abandonó la sesión del Concejo Deliberante visiblemente molesto, luego de recibir “desplantes” por parte de los nuevos ediles que asumieron recientemente.

Según testigos, concejales libertarios y maranguistas marcaron su postura desde el inicio de la jornada y tensionaron cada punto del orden del día. Incluso, algunos de ellos evitaron saludar al jefe comunal al ingresar al recinto, gesto que terminó de desencadenar el enojo del intendente.

Tras su salida, Ramos difundió un descargo donde cuestionó las actitudes de los nuevos concejales y remarcó que el poder “muestra la verdadera cara de las personas”. El intendente expresó: “Con los años aprendí que los cargos públicos no nos hacen mejores ni más importantes que nadie; al contrario, nos ponen a prueba todos los días para ver si seguimos siendo las mismas personas que éramos antes (…).

Ramos sostuvo que los vecinos observan con atención la conducta de sus representantes y que “los cargos pasan, pero la forma de tratar a la gente queda para siempre”.

El conflicto deja en evidencia un inicio de gestión legislativa marcado por las diferencias políticas y personales, y abre interrogantes sobre cómo será el vínculo entre el Ejecutivo y un Concejo renovado que, desde su primera sesión, mostró una postura confrontativa.

La principal confrontación fue con Camila Jorge, abogada e hija de Ariel “Maranga” Jorge. Previo al inicio de la sesión, Jorge expresó optimismo y compromiso con un Concejo “más abierto” a los vecinos.

Consultada sobre sus expectativas, afirmó: “Me preguntaban si vamos a tener la accesibilidad, las puertas abiertas al Concejo, y sí, es lo que tiene que ser”.

La edil también destacó que una de las principales demandas ciudadanas es recuperar la posibilidad de expresar sus reclamos de manera directa: “Una de las cosas que hemos caminado y escuchado en cada casa fue que no podían dar sus quejas, su voz hacia el Concejo; que le cerraron las puertas, que era virtual, que, bueno, infinitas cosas. (…). Cumplir con nuestra carta orgánica, abrirle las puertas a todos nuestros vecinos”.

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