Salvio despertó a Boca tras su tormento conyugal
Central Córdoba sufrió la noche de Eduardo Salvio, quien volvió a jugar en Boca tras la denuncia por violencia de género de su exmujer, y convirtió por duplicado en el Madre de Ciudades de Santiago del Estero.
A los dos minutos de juego en el Único Madre de Ciudades, el Toto, que había desperdiciado una chance inmejorable en el área, conectó con precisión un centro de Óscar Romero desde la izquierda y firmó el 1-0 ante el Ferroviario.
Apenas la pelota infló la red, el delantero xeneize fue a celebrarlo con sus compañeros y se besó el escudo de cara a la tribuna. Además, las cámaras de la TV lo capturaron secándose las lágrimas con la camiseta. Sergio García no quiso ser menos que Rossi y le atejó un penal a Renzo López, que en el final de la etapa se cobró revancha al ejecutar otro penal para igualar.
Ya en el cierre del complemento, a los 38 minutos, Salvio le sacó provecho a un centro al punto penal de Sebastián Villa y, con un cabezazo esquinado, anotó el 2-1. Sonrisa y puño apretado para alivio de Sebastián Battaglia, quien tendrá una oportunidad más como técnico. "Un poquito de paz" La semana más dramática de Sebastián Battaglia tuvo un respiro en la cálida Santiago del Estero. Con las dudas de siempre, el Xeneize se fue sonriente. “El triunfo de hoy (por ayer) es un premio para los jugadores por el esfuerzo que hacen”, dijo el entrenador, al tiempo que “pidió poquito de paz” ante una pregunta en la rueda de prensa cuando se le preguntó sobre el partido del martes por la Copa Libertadores.
