Rusia amenaza ir por nuevos objetivos en territorio ucraniano
El presidente de Rusia, Vladimir Putin, advirtió ayer que sus tropas atacarán nuevos objetivos si los países occidentales entregan misiles de largo alcance a Ucrania, mientras volvieron los ataques aéreos a Kiev y continuaban los combates en ciudades clave del este ucraniano, donde en los últimos días se concentraron los enfrentamientos por el control del Donbass.
Si Ucrania recibe misiles de largo alcance, "entonces sacaremos las conclusiones apropiadas y utilizaremos nuestras armas para atacar objetivos que atacamos hasta el momento", declaró Putin, en adelantos de una entrevista que preveía difundir la televisora rusa Rossiya-1, según la agencia de noticias AFP.
El mandatario no definió el alcance de la reacción que tendría su gobierno y juzgó que los actuales envíos de armas buscan "prolongar el conflicto".
Estas declaraciones tienen lugar luego de que Estados Unidos anunciase su decisión de entregar a Ucrania sus lanzacohetes múltiples Himars (High Mobility Artillery Rocket System) de un alcance de aproximadamente 80 kilómetros, que según expertos militares es levemente superior al de los sistemas análogos rusos, lo que permitiría a Ucrania atacar la artillería enemiga sin poder ser atacada por ésta.
En el campo de los combates, el gobernador regional de Lugansk afirmó el domingo que los rusos perdieron terreno en Severodonetsk, ciudad clave del este de Ucrania, donde en los últimos días se concentraron los combates por el control del Donbass.
"Los rusos controlaban cerca de 70% de la ciudad, pero durante los últimos dos días fueron repelidos; la ciudad está dividida en dos, tienen miedo de desplazarse libremente en ella", declaró en Telegram Serguéi Gaidai, gobernador de Lugansk, en parte controlada por los separatistas prorrusos desde 2014, y de la cual Severodonetsk es la capital administrativa ucraniana. Las fuerzas ucranianas capturaron ocho soldados rusos, agregó el gobernador.
Objetivo al 10 de junio
Según Gaidai, el general ruso Alexander Dvornikov "se fijó un objetivo: de aquí al 10 de junio tomar por completo Severodonetsk o controlar la ruta Lyssytchansk-Bajmut", que abrirá el camino hacia Kramatorsk, capital ucraniana de Donetsk, la otra provincia del Donbass. "Todas las fuerzas, todas las reservas (rusas) están concentradas en estas dos tareas", dijo.
Las declaraciones de Gaidai difieren de las del Ministerio de Defensa ruso, que el sábado afirmó que las unidades militares ucranianas se retiraban de Severodonetsk "tras haber sufrido pérdidas críticas durante combates por esa ciudad (hasta 90% en varias unidades)" hacia Lyssytchansk, una gran urbe vecina.
Pero, el alcalde de Severodonetsk, Olexander Striuk, declaró que los combates callejeros continuaban y que las fuerzas ucranianas buscaban "restablecer el control total" de la ciudad.