Con críticas y reclamos, se lleva adelante la séptima Cumbre de jefes de Estado
La primera sesión plenaria de la séptima Cumbre de jefes de Estado de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC), que tuvo lugar en el hotel Sheraton, ubicado en el barrio porteño de Retiro, contó con todos los condimentos.
El intercambio protagonizado por los 15 mandatarios presentes tuvo entre sus principales temas la preocupación por la crítica situación que se vive en Perú, el reclamo por el exmandatario Pedro Castillo y los cuestionamientos indirectos a Cuba, Venezuela y Nicaragua de Luis Lacalle Pou (Uruguay).
Boric pidió por la liberación de presos en Nicaragua. El mensaje conciliador de Lula y la felicitación a San Vicente y Granadinas por la presidencia de la CELAC 2023. Los planes de sociedad China y los pedidos de la India.
El presidente Alberto Fernández se mostró en alerta tras el medio centenar de muertos. "Quiero decir, como hombre que ha dedicado su vida a la docencia universitaria, veo con enorme preocupación que tanquetas avancen sobre la Universidad de Lima con los costos que eso significa en términos sociales", expuso al cierre de la sesión.
Durante el intercambio, Gustavo Petro (Colombia) dedicó parte de su intervención a cuestionar el encarcelamiento de Castillo: "¿Por qué tenemos que seguir manteniendo violaciones del sistema interamericano a pesar de que nuestros Gobiernos firmaron en el pasado el tratado?".
"¿Por qué tiene que haber golpes parlamentarios y violentos, por qué presidentes elegidos popularmente hoy están presos cuando deberían estar en esta mesa?". "Aquí tiene que haber un pacto democrático como se propuso en 1972. Si llegamos al poder desde las izquierdas no es para encarcelar derechas. En América Latina no tiene que haber un solo preso político", subrayó.
En la misma línea, Andrés Manuel López Obrador (México) pidió "no dejar solo al pueblo de Perú", y calificó de "infamia" la destitución y el encarcelamiento de Pedro Castillo tras el autogolpe que protagonizó, y "la forma en la que están reprimiendo al pueblo".
"Hay que suscribir un comunicado para exigir el cese la represión, sostuvo ante la presencia de la canciller, Ana Gervasi Díaz.
"¡No al autoritarismo y la libertad a Castillo! Está injustamente encarcelado", cerró AMLO en un mensaje grabado.
Venezuela, Cuba y Nicaragua, los países incómodos de la Cumbre
En la VII edición de la CELAC, la integración regional en materia económica y la defensa de la democracia estuvieron en el centro del debate.
Venezuela, Cuba y Nicaragua son hoy día los tres miembros más incómodos de la Cumbre de Estados Latinoamericanos y Caribeños, la CELAC. Si en la previa la polémica había girado en torno a la invitación a sus presidentes, durante la jornada del martes la discusión sobre ellos tuvo dos tonos bien marcados: libertades políticas e intervencionismo extranjero.
Respecto al primer punto, la discusión viró entre el apoyo y la condena, en ambos supuestos, de manera más implícita que directa.
El más explícito de entre los mandatarios fue el chileno Gabriel Boric, en consonancia con su discurso crítico desde que llegara al poder en Chile. El izquierdista pidió la liberación de los "opositores que aún se encuentran detenidos de forma indigna" en Nicaragua.
Respecto a Venezuela pidió elecciones "libres, justas y transparentes" y señaló en tono general que los atropellos a los derechos humanos se tienen que condenar "independientemente del signo político de quien gobierne".
El presidente de Paraguay, Mario Abdo Benítez llamó a abordar la situación de la diáspora venezolana, sin referirse tan directamente a la situación política del país.
"No podemos mirar a un lado, cuando más de siete millones de venezolanos han abandonado sus hogares pidiendo refugio", aseveró, recordando que según ACNUR la de Venezuela es la segunda crisis de desplazamiento externo más grande del mundo.
Otro referente de la nueva ola progresista latinoamericana, el colombiano Gustavo Petro, abogó por un "pacto democrático en donde las derechas y las izquierdas no crean que cuando llegan al poder es para eliminar a su contrincante físicamente".
Rechazo a los intervencionismos
La situación interna de Cuba quedó eclipsada por las de Venezuela y Nicaragua, pero sí estuvo presente en cuanto al intervencionismo extranjero.
Pese a su postura crítica, el propio Gabriel Boric apuntó que "la política de la exclusión no ofrece resultados auténticos ni durables. Así lo demuestra la historia de nuestra América Latina y el Caribe con el ignominioso bloqueo de Estados Unidos a Cuba y más recientemente a Venezuela".
Un apoyo agradecido por el propio Miguel Díaz-Canel, presente en la reunión pese a la polémica. Además, hubo un contundente reclamo para que se retire a Cuba de dicha lista (de estados patrocinadores del terrorismo) y se levante el bloqueo".