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El Senado, el paso decisivo para lograr la equidad tributaria de las tabacaleras

En medio de la votación histórica, el martes en el Congreso sobre la Ley “Bases y Puntos de Partida para la Libertad de los Argentinos”, se volvió a incorporar el capítulo que refiere al tabaco, y el cobro de impuestos para cigarreras nacionales y extranjeras.

Sobre el tema, el senador provincial y síndico de la Cámara del Tabaco de Salta, Enrique Cornejo, expresó en diálogo con medios locales, su profunda preocupación y crítica hacia los legisladores que votaron en contra de los intereses de su provincia y del país en general.

Las declaraciones de Cornejo revelan las complejidades de este debate y la importancia crucial que tiene para todas las economías regionales. "Esta temática no solamente afecta a las siete provincias productoras de tabaco, sino que afecta a toda la Argentina porque de la actividad de la fabricación de los cigarrillos, el Tesoro de la Nación recarga importantísimos recursos, y esos recursos son coparticipables a todas las provincias", sostuvo. Cornejo no solo destacó la necesidad de que todos los fabricantes de cigarrillos cumplan con sus obligaciones fiscales, sino que también señaló la influencia de los lobbies en el proceso legislativo. En este sentido, hizo hincapié en la importancia de combatir la evasión fiscal y el proceder ilegal de ciertas empresas tabacaleras, como Sarandí, que han sido objeto de controversia en el ámbito público.

En cuanto a la próxima votación en el Senado, Cornejo expresó su esperanza de que los senadores representantes de las provincias productoras de tabaco, incluida Salta, apoyen la ley. Destacó la importancia de que se apruebe una legislación que proteja los intereses provinciales y nacionales en materia fiscal y económica.

Primero la legislación

El senador del departamento de General Güemes, Enrique Cornejo lamentó la actitud de aquellos legisladores que, a pesar de tener conocimiento sobre la cuestión tributaria, optaron por seguir un mandato partidario en lugar de defender los intereses de su región: “Debo de felicitar a la señora Yolanda Vega, a Pablo Outes y a Pamela Caletti porque la verdad que hicieron lo que se tuvo que hacer. Felicitar al bloque de la Unión Cívica Radical, de la Coalición Cívica y la verdad, que lamentable la votación no positiva de Estrada, Moreno, Orozco y Zapata”. Las declaraciones del síndico de la Cámara de Tabaco de Salta, también apuntaron a una calificación de escandalosa. No obstante, subrayó la importancia de que prevalezca la institucionalidad y que se promulgue una legislación que garantice el cumplimiento de las obligaciones fiscales por parte de todos los fabricantes de cigarrillos en Argentina.

El derrotero del capítulo

El proyecto original, que se trató en enero y se retiró en febrero en la Cámara Baja, fue incluido tras la aprobación de la Ley Bases y previo al tratamiento del capítulo fiscal.

Este capítulo tabacalero que había enviado el Ejecutivo originalmente fue quitado de la nueva versión generando fuerte críticas de sectores aliados e importantes situaciones de tensión.

Los cambios originales proponían que todas las empresas del sector paguen los mismos impuestos. El perjudicado de esa modificación a la actual ley sería Pablo Otero, dueño de Tabacalera Sarandí, que paga menos que sus competidores ya que tiene en la Justicia un amparo contra el impuesto mínimo al cigarrillo.

 “Los cigarrillos, tanto de producción nacional como importados, tributarán sobre el precio de venta al consumidor, inclusive impuestos, excepto el impuesto al valor agregado, un gravamen del setenta y tres por ciento (73 %). Los cigarrillos de producción nacional o extranjera deberán expenderse en paquetes o envases en las condiciones y formas que reglamente el Poder Ejecutivo nacional”.
 

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