A pesar de las alarmas, aseguran que no hay motivos para preocuparse por los yacarés
La reciente aparición de yacarés en el área del Dique Cabra Corral ha encendido las alarmas entre los lugareños y turistas que frecuentan la zona.
Nuevo Diario dialogó con Mario Mosqueira, biólogo y guía de observación de naturaleza, quien ofreció detalles sobre esta situación y abordó las teorías que explican la presencia de estos reptiles en la zona, así como recomendaciones para la población.
Un visitante inesperado
“Lo que yo pienso -y aclaro, no tengo un dato exacto- es que alguien llevó al bicho y lo puso en el Cabra Corral”, expresó Mosqueira, descartando la posibilidad de que el animal llegara por sus propios medios desde zonas más cálidas como el Dique El Tunal. “Es muy difícil que haya subido a través del río Juramento o el Mojotoro, cruzando toda la ciudad, aunque estos bichos son nocturnos y se esconden bien”, explicó.
En esa línea, el especialista consideró más probable que alguien lo haya dejado allí, tal vez como mascota abandonada. Sin embargo, enfatizó que esta situación debe ser tomada con responsabilidad debido al carácter público del espejo de agua.
¿Peligro real o percepción exagerada?
Mosqueira brindó tranquilidad respecto a los riesgos asociados: “Estos animales tienden a alejarse ante el chapoteo de las personas. No son predadores como los cocodrilos africanos o australianos, que pueden atacar grandes mamíferos. El yacaré que tenemos en esta región, que puede medir hasta dos metros, es más tímido y se alimenta principalmente de peces”.
Sobre el peligro de un ataque, señaló que “una persona tendría que prácticamente meterle la mano o el pie en la boca del animal para que ataque”. Sin embargo, recordó que siempre existe un riesgo mínimo, sobre todo si alguien se acerca demasiado o lo provoca.
Opciones para manejar la situación
En cuanto al manejo de los yacarés, Mosqueira sugirió que las autoridades ambientales “deberían capturarlos, ya sea mediante trampas u otros métodos, y trasladarlos a su hábitat natural, como las zonas bajas del río Bermejo o Pilcomayo”. También mencionó la posibilidad de convenios con otras provincias para reubicar a los animales.
En caso de que los yacarés se reproduzcan -dado que se han reportado hasta cinco ejemplares-, el desafío sería mayor. “Si son cinco, ya se pueden reproducir o ya se han reproducido”, indicó Mosqueira.
El biólogo aprovechó para reflexionar sobre el manejo de animales silvestres: “Siempre mi recomendación es no compres, no captures, no colectes animales que son silvestres. Si encontrás uno en una situación vulnerable, informá a las autoridades ambientales para que se encarguen de reintroducirlo adecuadamente”.
Mosqueira también advirtió sobre los riesgos de tener animales exóticos como mascotas y luego liberarlos irresponsablemente: “No es solo peligroso para las personas, sino también para el propio animal, que en muchos casos no logra adaptarse y muere”.
Finalmente, Mosqueira llamó a apreciar la aparición de estos animales de manera positiva: “Si observaste algo tan raro y espectacular como un yacaré, disfrútalo, sácale una foto, pero no lo molestes. La naturaleza nos ofrece la oportunidad de admirar estas criaturas, siempre desde el respeto”.
Recomendaciones desde Ambiente de la provincia
Ante la posible presencia de yacarés en la zona del Dique Cabra Corral, la Secretaría de Ambiente y Desarrollo Sustentable recomienda las siguientes medidas de precaución:
1. Mantener una distancia segura de 20 metros aproximadamente a las zonas de presencia de yacarés.
2. No hacer ruido excesivo ya que esto puede perturbar a los animales y hacer que se vuelvan agresivos.
3. Evita nadar o acercarte a la orilla, especialmente al amanecer y al anochecer.
4. Si estás navegando, permanece alerta a cualquier ruido o movimiento extraño en el agua.
5. Supervisa frecuentemente a niños y mascotas.
Señales de advertencia:
– Presencia de huesos o restos de animales
– Huellas de 4 o 5 dedos
– Ruidos de gruñidos o rugidos