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Acusan de connivencia entre la Policía y Gendarmería en el robo de rieles en Morillo

Con nuevas testimoniales y pruebas contundentes aportadas por la Fiscalía de Distrito, el Juzgado Federal de Orán amplió la imputación penal de Miguel Atta Gerala, considerado ahora coautor del robo de rieles.

“Los saqueos ocurrían a la luz del día y con la connivencia de la policía y gendarmería”, afirmó el fiscal general, Eduardo Villalba, quien ya abrió dos causas contras dichas fuerzas.

A poco más de tres meses de la formalización de una investigación penal contra el ex intendente de Coronel Juan Solá (Estación Morillo), Atta Gerala, su hijo, José Miguel y David Medina, un comerciante de Orán, la Fiscalía de Distrito, a cargo del fiscal general, Eduardo Villalba, amplió la acusación penal contra el ex jefe comunal por el robo generalizado de vías férreas en el Chaco Salteño.

El agravamiento de la situación procesal del ex intendente se formalizó el jueves 20 de marzo pasado, en una audiencia dirigida por el juez federal de Orán, Gustavo Montoya, quien no tuvo reparos en conceder la ampliación de la imputación, a la vez que autorizó otra serie de medidas probatorias a fin de que se avance con el caso.

El juez, sin embargo, otorgó el arresto domiciliario al hijo de Gerala y Medina, detenidos desde el 4 de noviembre pasado, luego de varios allanamientos en Orán y Morillo, circunstancias en que se secuestraron 165 rieles sustraídos, 15 de ellos estaban en una propiedad del ex intendente.

A estos dos acusados se les imputó los delitos de contrabando de mercadería agravado por el número de intervinientes y por el uso de un paso no habilitado, en calidad de coautores. Al hijo de Gerala, en tanto, se le sumó el delito de “robo agravado por ser cometido en despoblado”.

Agravan el rol de Atta Gerala

Al mes, el 11 de diciembre, el fiscal general solicitó la detención del entonces intendente, a quien se le imputó los delitos de contrabando agravado por su valor, el número de intervinientes y la participación de un funcionario público, en concurso real con robo agravado por ser cometido en despoblado y en banda, en grado de partícipe necesario.

Ahora, sin embargo, su rol se agravó por el de coautor.

En dicha audiencia, también fue imputado por “malversación de caudales públicos, en función de que dispuso el uso de bienes públicos para el provecho personal”, dado el cargo que ocupaba al momento de los hechos, posición que perdió el 20 de noviembre pasado, al disponerse la intervención del municipio.

A comparación de su hijo y Medina, la medida de prisión preventiva que le fue impuesta fue bajo la modalidad de arresto domiciliario, condición que, en esta última audiencia, su defensa intentó cambiar por la libertad provisoria, pero el pedido fue rechazado por el juez, a instancias de los argumentos esgrimidos por la fiscalía al rebatir el planteo.

“Estamos ante un robo a cara descubierta que cuenta con el consentimiento de la policía de Morillo, la que está sujeta a la autoridad del ex intendente”, dijo el fiscal Villalba, al fundar las razones que llevaron a agravar la situación penal del ex intendente.

En intervalos con la auxiliar fiscal Roxana Gual, el representante del Ministerio Público Fiscal resaltó la tarea de campo realizada, la que llevó a un equipo de trabajo de la fiscalía a situarse en la localidad de Morillo, donde recibieron las testimoniales de integrantes de las comunidades originarias, quienes sindicaron al ex jefe comunal como el cabecilla del robo de rieles.

Asimismo, destacó el resultado de la pericia realizada al teléfono del hijo de Gerala, pues de la misma surgieron mensajes que fortalecieron la teoría del caso y, sobre todo, el vínculo directo que tenía el ex intendente con los robos de rieles registrados en la zona.

“Sin actuación policial”

En otro tramo de la audiencia, el fiscal sostuvo que uno de los roles centrales que tuvo el ex intendente consistió en la relación con el personal policial de ese municipio, a fin de evitar cualquier accionar que los pusiera al descubierto, “prueba de ello es que no hay ninguna actuación policial de Morillo respecto al robo de rieles registrados en su jurisdicción, pero sí existen intervenciones de las dependencias policiales vecinas”.

“El robo se hacía a la luz del día, los vecinos escuchaban los ruidos de cortes y extracción de los rieles y de las maquinarias”, resaltó el fiscal, para quien el ex intendente tuvo un rol preponderante sobre las fuerzas de seguridad de esa localidad, dada la ascendencia que ejercía, producto de un arraigo muy fuerte en la zona con casi 30 años como intendente, con excepción de cinco que fue diputado.

Villalba definió la investigación como “sumamente compleja”, ya que se realiza a contrapelo de la policía de la zona, al punto tal que se iniciaron actuaciones penales por la connivencia de personal de Gendarmería Nacional con la Policía de la Provincia con asiento en ese municipio.

Indicó que las mismas no responden a deducciones, sino a evidencias surgidas de una serie de intervenciones telefónicas. Al respecto, la auxiliar hizo énfasis en un diálogo mantenido por el hijo del ex intendente con un oficial de la comisaría de esa localidad.

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