Aguas del Norte pidió un aumento del 70,5% y comparó el precio del agua con una Big Mac

Durante la audiencia pública realizada el viernes, el gerente comercial de Aguas del Norte, Andrés Vuceracovich, defendió el pedido de incremento tarifario del 70,5% para el servicio de agua y saneamiento.

Señaló que Salta mantiene “una de las tarifas más bajas de la región” y que los aumentos moderados aplicados en años de alta inflación generaron una brecha estructural que hoy dificulta la operación del sistema.

Para dimensionar el desfasaje, comparó el costo del agua con productos de consumo cotidiano. “Una Big Mac equivale a 7.906 litros de agua; un alfajor, a 1.456 litros; y un litro de nafta, a 1.800 litros”, detalló.

Según sostuvo, un usuario residencial consume en promedio 25 mil litros mensuales y paga 22.970 pesos por agua y cloacas, lo que implica un valor de apenas 0,92 pesos por litro.

Comparaciones con otras provincias y la brecha estructural

Durante su exposición, Vuceracovich mostró una placa comparativa que ubicó a Salta muy por debajo de provincias como Misiones, Corrientes, Santa Fe o áreas de AYSA.

Esa diferencia tarifaria, afirmó, impide alcanzar la autosostenibilidad e impacta directamente en el mantenimiento, la operación y las inversiones necesarias para mejorar el servicio.

El gerente explicó que desde 2021 la empresa funciona con aportes extraordinarios del Tesoro provincial para cubrir el déficit operativo.

“Es un esquema que representa una carga fiscal considerable y que limita la capacidad de inversión”, indicó.

A su vez, advirtió que el mantenimiento preventivo quedó reducido al 9% del presupuesto, lo que aumenta el riesgo de fallas y la necesidad de reparaciones de emergencia.

Presupuesto 2026

Vuceracovich detalló que para 2026 el costo operativo proyectado asciende a $177.146 millones, a lo que se suma un Plan de Expansión y Mejora (PEM) de $16.615 millones, totalizando $193.762 millones.

Con la tarifa vigente, la empresa solo podría cubrir el 60% de esos gastos. Más del 80% de los costos se concentra en rubros inelásticos como energía eléctrica —que representa el 17% del total—, mano de obra, productos químicos y servicios vinculados a la operación continua.

“Con estos valores, seguir con la tarifa actual implica profundizar un modelo deficitario que compromete la infraestructura futura”, sostuvo.

Proyección financiera: equilibrio en abril de 2026

Según la proyección presentada, si el incremento del 70,5% se aplica desde enero, Aguas del Norte alcanzaría el punto de equilibrio en abril de 2026. A partir de allí, no requeriría aportes del Estado provincial y podría financiar tanto el costo operativo como el plan de expansión.

“Buscamos garantizar continuidad, previsibilidad y autonomía operativa”, remarcó Vuceracovich, al presentar una gráfica donde los ingresos tarifarios equiparan los egresos desde el segundo trimestre del próximo año.

Régimen de subsidios

El gerente comercial también se refirió al esquema de subsidios vigente. Señaló que la tarifa social alcanza hoy a 88 mil usuarios —el 31% del padrón residencial—, mientras que solo el 4% recibe subsidio por indigencia, un porcentaje que calificó como insuficiente frente a los niveles de pobreza actuales.

Vuceracovich propuso optimizar la asignación de beneficios, priorizando zonas críticas y comunidades vulnerables. También planteó retomar subsidios focalizados por comunidad, especialmente para pueblos originarios del interior, donde las condiciones socioeconómicas y de infraestructura requieren un tratamiento diferencial.

Recordó que en 2025 se descontaron 3.000 millones de pesos en tarifa social, un monto que consideró necesario reconocer para preservar la sostenibilidad del sistema.

Equilibrio, sostenibilidad y protección social

En el cierre de su presentación, el funcionario subrayó que la actualización tarifaria persigue un objetivo central: lograr la autosostenibilidad financiera del servicio sin dejar de proteger a los usuarios vulnerables. “La autosostenibilidad no es un fin recaudatorio, sino la condición mínima para asegurar que el sistema funcione, se mantenga y crezca”, afirmó.

Sostuvo que la propuesta apunta a “un equilibrio responsable entre la sostenibilidad operativa y la protección social”, y aseguró que un esquema financiero estable permitirá fortalecer el mantenimiento, mejorar la infraestructura y garantizar el servicio.